Lavie Tidhar es un escritor polifacético que lo mismo te escribe una novela juvenil como Candy que se descuelga con un libro de difícil clasificación como Unholy Land.
Digo que es de difícil clasificación porque se puede adscribir a varios subgéneros de la ciencia ficción sin pertenecer en realidad a ninguno claramente.
El protagonista es Lior Tirosh, que podría ser una personificación de propio Tidhar, un escritor de “medio pelo” de origen judío pero afincado en Berlín que por una enfermedad de su padre se desplaza a su lugar de nacimiento. Pero no es Israel, tal y como la conocemos, Palestina es un asentamiento en África, dando el punto de partido a una ucronía absorbente. Además este hecho podría haber tenido lugar en realidad, ya que a principios del siglo pasado se realizó una expedición con la intención de valorar esa posiblidad.
La prosa de Tidhar es tan maravillosa como siempre, con una gran cantidad de juegos metaliterarios y referencias a su propia obra, así como guiños a la situación actual en Israel estableciendo paralelismos con esta mítica Unholy Land de la que nos habla el autor. Pero sin duda lo que resulta más llamativo son las diferentes voces que utiliza. Variando entre una primera persona antinatural, porque no le da la voz al protagonista, una segunda persona desconcertante y una tercera persona que nos sirve para estabilizarnos, el autor consigue un estado permanente de confusión en el lector y exige un esfuerzo constante para situarnos en la trama.
Los cambios de entorno son continuos pero sutiles. Vemos cómo Tirosh actúa de forma contraria a la que esperaríamos depediendo de la situación en la que se encuentre, porque en realidad no es el mismo personaje en todo momento y no estoy hablando solo metafóricamente.
Unholy Land es una novela difícil pero atractiva, con una perspectiva distinta de una ucronía que nos podría recordar a El sindicato de policía Yiddish por su punto de partida pero que navega por derroteros totalmente diferentes. No es para todo el mundo, pero creo que para un lector de ciencia ficción habitual resultará muy atractiva.