Mis nominaciones a los Hugo 2014

Este post también podría llamarse por qué no puedo ganarme la vida como adivina pero como algunas personas me lo han pedido, aquí os pongo mis nominaciones a los Hugo, en las que no he acertado con el gusto general.

Mejor Novella

“The eye with which the universe beholds itself” de Ian Sales

“Then will the great ocean wash deep above” de Ian Sales

“Iseul’s Lexicon” de Yoon Ha Lee

“The wages of humanity” de Cixin Liu

Mejor novelette

“The waiting stars” de Aliette de Bodard

“Sanctuary” de Susan Palwick

“Kabu, kabu” de Nnedi Okorafor (la reseña, próximamente)

Mejor relato corto

“A bridge of words” de Dinesh Rao

“Water” de Ramez Naam

“Selected program notes from the retrospective exhibition of Theresa Rosenberg Latimer” de Kenneth Schneyer

“The ink readers of Doi Saket” de Thomas Olde Neuvet (la reseña, próximamente)

“Loss, with chalk diagrams” de E. Lily Yu

¿Habéis votado en los Hugo?

Libro gratis : Tüki y RASL

TUKI-with-logosJeff Smith es internacionalmente conocido por Bone, un estupendo tebeo indie. En uno de sus últimos proyectos se embarcó en la aventura de crear dos webcomics gratuitos que luego sería posible comprar en versión impresa.

Aquí podréis leer la historia de Tüki, Save the humans.

Y aquí la de RASL con interesantes toques de ciencia ficción que el autor deja entrever en el primer capítulo disponible, pero que no sabemos a dónde nos podrán llevar.

Kontakt

kontaktYa había tenido un primer contacto con la ciencia ficción croata pero gracias a Cheryl Morgan pude tener acceso a una copia de esta antología con relatos de muy diverso origen pero de calidad bastante alta.

Bloodhound de Milena Benini

Las modificaciones genéticas a las que se sometió el protagonista de esta historia aumentaron de tal forma sus habilidades sensoriales que cuando se sospecha que han secuestrado a su vecina no le queda más remedio que adentrarse en el bosque a buscarla.

La historia es entretenida y se deja leer. La idea de humanos y animales con capacidades aumentadas no es original, pero gracias a esto y a la forma de expresarse de Benini el cuento es divertido.

Hi-Tech Sex Lib de Dalibor Perković

¿Una máquina de viajes en el tiempo de uso casero? ¡Póngame dos! Una pareja compra un aparato para viajar en el tiempo y así aprovechar más las horas del día, trabajando en equipo con sus yoes del pasado. Irremediablemente, acaban utilizándolo para llevar a cabo todo tipo de combinaciones sexuales, pero algo acabará saliendo mal.

Aunque el viaje en el tiempo está más que visto en la ciencia ficción, siempre se puede sacar provecho de este tropo para explorar otros campos. Perković aprovecha para plantear una discusión sobre el libre albedrío (si ya has estado con tu yo del futuro, ¿te obliga esto a viajar al pasado?) aderezado con toques sexuales que añaden picante a la historia. Recomendable.

Give me the shuttle key! de Tatjana Jambrišak

La exploración espacial es un campo abonado para la ficción. Los protagonistas de la historia son un matrimonio lineal, muy heinleniano, compuesto por dos mujeres con sus peculiaridades y tres hombres sincronizados.

Con cierto sabor a ciencia ficción de la edad de oro, pero que se deja leer, este relato resulta muy entretenido a pesar de ser bastante previsible.

The corridor de Darko Macan

Esta historia me ha recordado poderosamente “Il deserto dei tartari” de Dino Buzzatti (salvando las distancias) por ese sentimiento de espera infinita del enemigo que no acaba de llegar, en el que los jóvenes de cada generación desperdician sus vidas en la indolencia de la pasividad. La exaltación de la inmovilidad como forma de promoción y la locura como consecuencia de la soledad son otros temas trascendentes que se tratan en este impresionante relato.

The dead de Aleksandar Žiljak

No me gustan las historias de zombis y esta no es una excepción. Entiendo que se utilice como recurso para hablar sobre la alienación de los obreros en las cadenas de montaje, pero los detalles gore son insalvables para mí.

koranaRiver fairy de Ivana Delač

La fantasía también está presente en esta recopilación. Desde tiempos inmemoriales se ha dotado a las fuerzas de la naturaleza de personalidad para contar relatos en la tradición oral y escrita de la humanidad. En este caso, el protagonista es el río Korana, cuya presencia femenina inunda todo el paisaje a su alrededor hasta que los humanos comienzan a poblar su ribera. Al principio el hada observa curiosa y casi encariñada los esfuerzos de los hombres por establecerse en su nuevo hogar, pero pronto la miseria y la guerra se cobra su precio.

Me ha gustado mucho esta alegoría de los resultados de la guerra fraticida de los Balcanes.

De cadenza de Danijel Bogdanović

Un relato erótico en el espacio que no pasa de ser una simple concatenación de escenas sexuales.

Everytime we say goodbye de Zoran Vlahović

En esta creativa historia se mezclan distintas percepciones del tiempo, ideas como el sacrificio temporal a cambio del bienestar futuro de nuestros descendientes, nanotecnología y batallas espaciales. ¿Se puede pedir más?  Pues hay más, este relato fue mención honorífica en los premios de traducción Science Fiction and Fantasy Translation Awards.

De los mejores de la antología.

Avaleon and the black feather de Katarina Brbora

Mezclando elementos de la Biblia con otros mundos alternativos, Brbora construye una narración un poco alocada que no aporta nada nuevo y que no deja huella.

Time enough, and space de Goran Konvični

Inspirándose en un famoso relato de Heinlein, Goran Konvični nos sitúa en un mundo donde el uso de la bomba atómica no ha provocado la destrucción total, si no “solo” la de las grandes superpotencias,  que en un gesto de caballerosidad antes de la destrucción mutua permiten a la población civil emigrar. El problema en la Tierra es el espacio, ya que los refugiados son acogidos en otros países ya poblados.

Cuando la tensión por las estrecheces aumenta, aparece un vendedor ambulante de espacio. ¿Es un bulo o una nueva tecnología que cambiará el mundo?

El relato es muy entretenido y las extrapolaciones a las que llega son interesantes, aunque el final no me acaba de convencer.

The executor de Zoran Krušvar

Un espléndido colofón para una antología realmente sorprendente.

Un enviado de la Iglesia llega a un pueblo remoto en el que se dice que habita una bruja. El ejecutor mantiene un monólogo dirigido a su Dios mientras investiga los hechos e idea un plan para librar a la aldea de la bruja.

El autor mezcla de forma muy convincente fantasía y ciencia ficción, mientras critica de forma nada velada el fanatismo religioso. Un relato cruel, pero que te deja reflexionando.

Me ha gustado mucho esta antología, me parece un proyecto interesante dar a conocer más allá de las fronteras de cada país los relatos que más sobresalen dentro de la tradición fantástica. El vehículo para esto, obviamente, es la traducción al inglés ya que así se alcanza una audiencia mucho mayor. Es una iniciativa que se podría / debería tener en cuenta en otros países.

Finalistas Semana Negra (Celsius)

Acaban de hacerse públicos los finalistas de los premios de la Semana Negra de Gijón y por lo tanto, los finalistas del Celsius. Son los siguientes:

“Hijos del Clan Rojo”, de Elia Barceló

“Los nombres muertos”, de Jesús Cañadas

“Memoria de tinieblas”, de Eduardo Vaquerizo

¡Enhorabuena a los finalistas! El Celsius de este año promete ser apasionante.

Entrevista a Peter Higgins

De nuevo en tándem con Sense of Wonder, os ofrecemos esta reveladora entrevista con Peter Higgins, autor de la más que recomendable “Wolfhound Century”, que amablemente ha contestado a nuestras preguntas. (Puedes leer la entrevista en inglés aquí y librarte así de la traducción que hemos hecho).

Peter Higgins Portrait

¿Cuándo supiste que querías ser escritor? ¿Qué autores te han influido más? ¿Hay algún escritor actual al que admires?

Siempre he sido un lector voraz y de amplio espectro, y tengo muchas influencias, pero hay dos libros en particular que me convirtieron en escritor: ”Little, Big” de John Crowley y “The Book of the New Sun” de Gene Wolfe. Me hicieron ser consciente de nuevo de cuán interesante, ambigua y sorprendente podía llegar a ser la ciencia ficción y la fantasía. Descubrir estos libros me dio una dirección a seguir, y el empujón que necesitaba para responder a esa voz interior, ese instinto ignorado durante largo tiempo de que quería escribir así como leer.

Hay muchos escritores contemporáneos a los que admiro, pero si tengo que escoger sólo a uno, ahora mismo sería Cormac McCarthy. Escribe con una fuerza moral apabullante y con gran intensidad literaria, y utiliza géneros familiares (western, tráfico de drogas, un viaje postapocalíptico) y los vuelve completamente nuevos y llenos de extrañeza y poesía oscura.

Wolfhound Century Cover Orbit

¿Dónde te inspiraste para crear “Wolfhound Century”? ¿Has estado alguna vez en Rusia?

Me crié durante la Guerra Fría, y siempre fui muy consciente de la presencia de Rusia en el mundo: algo profundo y aterrador, pero también misterioso, extraño y (en aquel momento) inaccesible. El sentimiento general era que la destrucción nuclear por parte de la Unión Soviética podía caer sobre nosotros en cualquier momento, que había tanques esperando en la frontera, espías y todo eso. Desfiles en la Plaza Roja. Pero también había otra cara de Rusia que era muy visible entonces (más que ahora, creo): libros de escritores como Solzhenitsyn y Pasternak estaban presentes en todas partes, en las estanterías de librerías y bibliotecas. Conforme fui madurando fue consciente de la música, el arte, el folclore ruso… y también el enorme papel que representaba la URSS en las guerras mundiales, el terror estalinista, la increíble opresión burocrática del bloque comunista. Leí a Dostoevsky y Bulgakhov como si fueran atisbos de un mundo alternativo mejor. Interioricé este sentimiento de Rusia como un lugar enorme, casi mágico, y gran parte de ello era porque no podías ir allí: era un lugar al otro lado de la frontera, a través de un espejo, que podías alcanzar a través de las historias y la imaginación.

“Wolfhound Century” es acerca una Rusia mitológica e imaginada. Es una percepción de Rusia desde el otro lado del telón. Es ciencia ficción, fantasía y mito. Nunca he estado allí. Si fuera a Rusia ahora, el lugar que yo he imaginado no estaría allí, y si escribiera acerca de la Rusia “real” el resultado no sería como “Wolfhound Century”.

¿Crees que la historia alternativa o la ficción histórica es un género por sí mismo o pertenece a la ciencia ficción? ¿Cómo clasificarías “Wolfhound Century”? ¿Crees que las etiquetas no tienen sentido?

Mi propia visión del género es que no hay etiquetas ni cajas. Cada género tiene su propia colección de ideas y técnicas, su propia manera de ver el mundo, pero no son mutuamente exclusivos: no es sí o no. Para mí, como escritor y como lector, los libros son lugares donde los géneros se pueden mezclar y chocar. Cada nuevo libro reinventa sus propias tradiciones y redefine su género (o por lo menos, es muy aburrido y predecible si esto no ocurre).

No puedo decir si la historia alternativa pertenece a la ciencia ficción o no, porque para mí las líneas que lo podrían enmarcar son cambiantes e indefinidas. Hay algunos libros, como “The Man In the High Castle” de Philip K Dick, que parecen pertenecer rotundamente a la tradición de la ciencia ficción, pero hay relatos de detectives en historia alternativa (como “Fatherland” de Robert Harris) o novelas literarias (como “The Plot Against America” de Philip Roth) que usan la idea de la historia alternativa pero, para mí, están intentando algo distinto a la ciencia ficción. Estoy incluso tentado de decir que, de una manera u otra, toda la ficción es historia alternativa: otras versiones de la realidad; personajes y acontecimientos que podrían haber ocurrido, historia vista a través de los cristales transformadores de una sensibilidad imaginativa particular, historia con algo añadido, algo cambiado.

Creo que hay una tradición particular de historia alternativa que tiene sus propias reglas: la idea del Punto de cambio; nuestra historia con un cambio en una cosa específica, pero por otra parte el mundo es reconocible como nuestro y la historia sigue las reglas familiares de desarrollo lógico. Lo llamaría historia alternativa “respetable”. Mis libros no son así. La trilogía Wolfhound Century trabaja con atmósferas históricas e ideas, y algunos personajes e incidentes tienen raíces “reales”, pero estoy tan interesado en el arte y en la escritura, en las ideas y en las emociones de un periodo como en los eventos políticos. Es acerca de unas historia distorsionada, reinventada. He tomado material de otros tiempos y lugares y hay fantasía y magia en en la construcción del mundo. Algunas veces lo llamo historia alternativa no respetable.

¿Cómo escribes? ¿Tienes la trama en mente y luego te dejas llevar o planificas cada pequeño paso de tus personajes?

Trabajo mucho en la preparación y en la planificación antes de empezar a escribir. En primer lugar recopilo ideas, imágenes y posibles personajes, antes de empezar a pensar demasiado sobre cómo unirlos. Después planifico mucho, trabajo en las conexiones entre las ideas que he reunido y desarrollo la estructura de la historia. (Temo perderme y no ser capaz de terminar, así que me aseguro de que tengo algún lugar al que llegar antes de empezar a escribir). Pero el propio proceso de escritura es algo sorprendente: los personajes cobran vida y la historia se mueve de formas inesperadas. Esto no es un problema: simplemente cambio el plan. Y cuando he terminado el primer borrador edito y reviso mucho: para mí, el primer borrador es la exploración, y luego miro a ver qué tengo. Ese proceso de edición es muy importante, creo, porque es cuando transformas tu trabajo en algo en lo que el lector puede entrar y compartir.

russiantales¿Cómo usas el folklore ruso en tus libros? ¿Dónde conociste términos como paluba, gigantes…?

Tomo ideas desde diversas fuentes. Me gusta especialmente una colección de historias para niños llamada ”Old Peter’s Russian Tales” de Arthur Ransome, pero también encuentro cosas interesantes en colecciones eruditas de mitología eslava, la épica finlandesa “Kalevala” e historias escandinavas (no todo en “Wolfhound Century” es específicamente ruso: el interminable bosque oscuro de historias folclóricas es mayor y más antiguo que Rusia). Y algunas otras simplemente las inventé, o al menos, creo que lo hice: cuando te vienen las imágenes a la cabeza no siempre es posible localizar sus raíces.

La presencia del mito y el folclore en el mundo de “Wolfhound Century”, donde todo es real y tiene implicación en la historia, es parte de la construcción de un mundo que está absolutamente lleno de posibilidades y potencial, donde la gente (la mayoría de la gente) percibe y experimenta el mundo en un sinfín de formas; en lo privado, lo extraño y lo mágico así como en lo público y en lo oficialmente permitido. Hay cosas viejas, extrañas, ahí fuera el mundo natural está lleno de vida y conciencia, y la consciencia humana completa es parte de ello. El estado totalitario, el régimen burocrático opresivo o la mente del terrorista absolutista centrado en un solo objetivo no es incompatible con lo anterior, y gran parte del conflicto y de la energía de la historia viene de ese choque.

¿Has leído “The secret history of Moscow” de Ekaterina Sedia? ¿Crees que están escritos en un terreno común pero con alcances distintos?

He oído hablar del trabajo de Ekaterina Sedia y parece brillante, pero no lo he leído. De hecho, lo he evitado deliberadamente: ¡voy a leer “The secret history of Moscow” cuando acabe mi trilogía!

truth and fear
Estoy interesada en el espionaje, y encuentro fascinante la historia del NKVD. Me atrevería a decir que te ocurre lo mismo. ¿Es cierto? ¿Veremos más intrigas en los siguientes libros?

¡Sí! ¡Y sí! Me encantan los thrillers de espionaje tanto como la fantasía y la ciencia ficción y creo que la historia de la policía secreta y la vigilancia – el aparato del estado aterrorizador y vigilante utilizado contra los propios ciudadanos – es triste y horriblemente fascinante. Hubo un momento antes del final de la Guerra Fría en el que todo aquello parecía acabado, pero ha vuelto a la vida de forma vengativa en los últimos años, con un nuevo giro. La secuela a “Wolfhound Century”, que se publicó hace unas semanas (“Truth and Fear”) vuelve al mismo territorio y lo expande, con algunos cambios dramáticos.

malevich mujhik
¿Puedes explicarnos la etimología de la palabra mudjhik en tus libros?

Los mudjhiks son figuras más grandes que los humanos, normalmente de color ladrillo oscuro o morados, algo parecido a los gólems, que el régimen del mundo de “Wolfhound Century” construye y utilizar en la guerra y en la opresión. La raíz de la palabra es mujhik, campesino en ruso. Le añadía la “d” por varias razones complejas: en parte para hacerlo sonar ruso sin serlo, y también porque los gólems se hacen a menudo de barro (mud) y la palabra inglesa para campesino (peasant) como el francés paysan, significa “hombre de la tierra, hombre del campo”. También está la idea de que Adán significa “tierra roja” y Adán fue creado de tierra, mientras que mis mudjhiks son una pseudocreación, una abominación animada medio viva.

¿Las redes sociales son importantes para tus relaciones con otros escritores y tus lectores?

Son extremadamente importantes: la comunidad de lectores y escritores de ciencia ficción y fantasía es una presencia muy grande y poderosa, y si contribuyes con algo en ese mundo estás participando en un diálogo. Es una comunidad culta, creativa, inspiradora y de forma mayoritaria abierta y receptiva, llena de energía, sensibilidad y sorpresas. He aprendido mucho de ellos: creo que escribir ficción es algo sobre la comunicación, no solo autoexpresarse, así que es fantástico sentir, a través de los social media, sitios webs, blogs, convenciones y demás, al resto de la gente que están ahí fuera leyendo y escribiendo acerca de los mismos libros que yo.

Pero también hay que ser cuidadoso, ya que existe el riesgo de que todo se vuelva inmanejable: al fin y al cabo escribir ficción es un negocio solitario y tienes que proteger tu privacidad y tranquilidad, de forma que puedan surgir tus propias ideas. Por eso no tengo cuenta de Twitter, por ejemplo.

¿En qué estás trabajando ahora mismo? ¿Puedes dejarnos entrever algo de tus futuros proyectos?

Estoy dando los últimos toque a “Radiant State”, la tercera y última parte de la trilogía Wolfhound Century, que completa el arco argumental que comienza con “Wolfhound Century” y continúa con “Truth and Fear”. “Radiant State” se publicará a comienzos del 2015. ¿Y tras esto? Algo distinto, pero no he decidido el qué.

¿Dónde pueden nuestros lectores aprender más sobre tí y tu trabajo?

Mi web es www.wolfhoundcentury.com También tengo una página de autor en Facebook y algunas veces escribo sobre libros que me gustan en Goodreads.

¿Algo más que añadir?

¡Solo darte las gracias por invitarme a esta entrevista! Ha sido divertido y la he disfrutado mucho.

Queremos reiterar nuestro agradecimiento a Peter Higgins por contestar tan rápida y profusamente a nuestras preguntas. Esperamos impacientes leer “Truth and Fear”.

Antologías de Relatos de Ciencia Ficción escritos por Mujeres

La existencia de antologías de ciencia ficción escritas y recopiladas exclusivamente por mujeres es un síntoma de la salud y vitalidad de la literatura de género. Es decir, lo es en otros países porque el mercado español no ofrece ninguna, como tampoco ofrecía hasta hace poco antologías de steampunk, de literatura extraña o, sacrilegio de los sacrilegios, antologías en las que los nombres extranjeros convivieran en pie de igualdad con los nacionales. Los tiempos están cambiando.

Por eso no debería sorprender a nadie que Cristina Jurado y Cristina Macía hayan decidido lanzarse a la piscina y recopilar la primera antología de ciencia ficción exclusivamente femenina hecha en España. Decimos que no debería sorprender, aunque, de hecho, sabemos que sorprende y mucho. Las críticas, sin duda, por más que conciliadoras en el mejor de lso casos, no tardarán en llegar. Precisamente por eso pensamos que este tipo de iniciativas no es sólo tan legítima como Los Mejores Relatos Polacos Sobre Viajes en el Tiempo, sino mucho más pertinente y necesaria.
Continuar leyendo “Antologías de Relatos de Ciencia Ficción escritos por Mujeres”

iD

idDentro de mi a todas luces insuficiente planificación de lecturas para los premios Hugo, había decidido leer “iD”, de Madeline Ashby. Para ello, se antojaba imprescindible terminar primero “vN”, algo que hice con sumo agrado.

A pesar de que el final de los acontecimientos de la primera entrega dejaban la trama en un tenso status quo que podía dar finalizada la historia, la autora decide desde el primer momento romper la baraja de esta situación, provocando un cambio de protagonista que quizá no le siente bien al libro.

Si en “vN” el carisma de Amy (y por tanto de Portia) era el motor que hacía avanzar la historia, en “iD” esta responsabilidad recae sobre los hombros de Javier, y a veces se torna en una carga demasiado pesada para él. La trama me ha parecido una precipitada huida hacia delante, ayudada por casualidades rocambolescas que dicen poco a favor de la planificación sin duda realizada por la autora. Continuar leyendo “iD”

Contenidos de The mammoth book of sf stories by women

TheMammothBookOfSFStoriesByWomenGracias a SF Signal hemos podido tener acceso al índice de la antología recopilada por Alex Dally MacFarlane de ciencia ficción escrita por mujeres. La lista de autoras es espectacular y algunos relatos que ya he leído, como “Spider the Artist”, “Immersion” o “Astrophilia” me indican a pensar que si el resto de las historias tiene el mismo nivel, este libro va a ser una compra obligada.

“Girl Hours” de Sofia Samatar
“Excerpt from a Letter by a Social-realist Aswang” de Kristin Mandigma
“Somadeva: A Sky River Sutra” de Vandana Singh
“The Queen of Erewhon” de Lucy Sussex
“Tomorrow Is Saint Valentine’s Day” de Tori Truslow
“Spider the Artist” de Nnedi Okorafor
“The Science of Herself” de Karen Joy Fowler
“The Other Graces” de Alice Sola Kim
“Boojum” de Elizabeth Bear y Sarah Monette
“The Eleven Holy Numbers of the Mechanical Soul” de Natalia Theodoridou
“Mountain Ways” de Ursula K. Le Guin
“Tan-Tan and Dry Bone” de Nalo Hopkinson
“The Four Generations of Chang E” de Zen Cho
“Stay Thy Flight” de Élisabeth Vonarburg
“Astrophilia” de Carrie Vaughn
“Invisible Planets” de Hao Jingfang
“On the Leitmotif of the Trickster Constellation in Northern Hemispheric Star Charts, Post-Apocalypse” de Nicole Kornher-Stace
“Valentines” de Shira Lipkin
“Dancing in the Shadow of the Once” de Rochita Loenen-Ruiz
“Ej-Es” de Nancy Kress
“The Cartographer Wasps and the Anarchist Bees” de E. Lily Yu
“The Death of Sugar Daddy” de Toiya Kristen Finley
“Enyo-Enyo” de Kameron Hurley
“Semiramis” de Genevieve Valentine
“Immersion” de Aliette de Bodard
“Down the Wall” de Greer Gilman
“Sing” de Karin Tidbeck
“Good Boy” de Nisi Shawl
“The Second Card of the Major Arcana” de Thoraiya Dyer
“A Short Encyclopedia of Lunar Seas” de Ekaterina Sedia
“Vector” de Benjanun Sriduangkaew
“Concerning the Unchecked Growth of Cities” de Angélica Gorodischer
“The Radiant Car Thy Sparrows Drew” de Catherynne M. Valente

¿No os dan ganas de tenerlo ya?

iD

portada iDDentro de mi a todas luces insuficiente planificación de lecturas para los premios Hugo, había decidido leer “iD”, de Madeline Ashby. Para ello, se antojaba imprescindible terminar primero “vN”, algo que hice con sumo agrado.

A pesar de que el final de los acontecimientos de la primera entrega dejaban la trama en un tenso status quo que podía dar finalizada la historia, la autora decide desde el primer momento romper la baraja de esta situación, provocando un cambio de protagonista que quizá no le siente bien al libro.

Si en “vN” el carisma de Amy (y por tanto de Portia) era el motor que hacía avanzar la historia, en “iD” esta responsabilidad recae sobre los hombros de Javier, y a veces se torna en una carga demasiado pesada para él. La trama me ha parecido una precipitada huida hacia delante, ayudada por casualidades rocambolescas que dicen poco a favor de la planificación sin duda realizada por la autora.

En su tónica habitual, el prólogo de Ashby es rompedor, prácticamente una historia corta en sí mismo. Ojalá hubiera seguido por ese camino en el resto del libro, explorando el mundo que dio lugar a los vN, pero esta parte perteneciente al pasado no se visita mucho.

La obsesión de todos los personajes por el sexo también me parece desproporcionada. Es la fuerza motriz que genera todos los actos de los personajes “humanos” y es la única arma con la que cuentan los vN para “controlar” a las personas. Pero que todos los planes de Javier para seguir adelante con su búsqueda pivoten alrededor de su indudable atractivo sexual raya lo absurdo.

No todo son puntos negativos. Las distintas ciudades que visita Javier nos permiten vislumbrar diversas soluciones para la coexistencia de humanos y máquinas, desde el modelo Stepford al paraíso de los vN, la mítica Mecha. Me gustan también las menciones al Uncanny Valley y ciertas referencias al problema medioambiental que supone el abandono de metales pesados en el ambiente.

Un grave problema es que en la resolución final del conflicto de Javier con otro personaje la autora hace trampa, saltándose las normas sobre la failsafe en la que ha sustentado la estructura de sus libros.

Mención especial merece el epílogo donde Ashby vuelve a dejarnos claro quién lleva las riendas en este mundo y donde deja preparado un interesantísimo escenario para su siguiente libro.

En definitiva, el ser un libro intermedio en una trilogía no favorece nada a este “iD” que se queda a medio camino de lo que pretendía ofrecer. La pérdida de frescura de las ideas presentadas en “vN” y la preparación de la que se supone será última entrega lastran demasiado al libro. Es una lectura entretenida, pero como novela falla en distintos niveles.