Nominados a los premios Aurora 2021

Aquí os traigo la lista de nominados a los canadienses premios Aurora 2021.

Mejor novela

Beneath the Rising, Premee Mohamed, Solaris
A Connecticut Gumshoe in King Arthur’s Court, Randy McCharles, Tyche Books
Mexican Gothic, Silvia Moreno-Garcia, Random House Publishing Group
The Oppenheimer Alternative, Robert J. Sawyer, Red Deer Press
A Stitch in Time, Kelley Armstrong, KLA Fricke

Mejor novela juvenil

Dragon Assassin, Arthur Slade, Scholastic Canada
Flights of Marigold, Susan Forest, Laksa Media Groups Inc.
The Gryphon’s Lair, Kelley Armstrong, Puffin Canada
Hollow, Rhonda Parrish, Tyche Books
Wall of Wishes, Suzy Vadori, Old Vines Press

Mejor novela corta / relato largo

Go Fish, Ian Rogers, Tor.com
The Immolation of Kev Magee“, L.X. Beckett (pseudónimo for A.M. Dellamonica), Clarkesworld, Número 167, Agosto
An Important Failure“, Rebecca Campbell, Clarkesworld, Número 167, Agosto
The Joy in Wounding“, Charlotte Ashley, The Magazine of Fantasy and Science Fiction, Noviembre / Diciembre
How Quini the Squid Misplaced His Klobučar, Rich Larson, Tor.com
To Sail the Black“, A.C. Wise, Clarkesworld, Número 170, Noviembre
Tool Use by the Humans of Danzhai County“, Derek Künsken, Asimov’s Science Fiction Magazine, Julio / Agosto

Mejor relato

All Cats Go to Valhalla“, Chadwick Ginther, Swashbuckling Cats: Nine Lives on the Seven Seas, Tyche Books
The Bone-Stag Walks“, KT Bryski, Lightspeed Magazine, Número 123, Agosto
Breathe“, Calvin D. Jim, Prairie Gothic, Prairie Soul Press
Grass Gods“, Elizabeth Whitton, Prairie Gothic, Prairie Soul Press
Night Folk“, Barb Galler-Smith, Galaxy’s Edge Magazine, Número 47, Noviembre
So You Want to be a Honeypot“, Kelly Robson, Uncanny Magazine, Marzo / Abril

Mejor cómic

Crash and Burn, Kate Larking y Finn Lucullan, Astres Press
Goblins, Ellipsis Hana Stephens, Goblins Comic
Gothic Tales of Haunted Futures, editado por S.M. Beiko, Renegade Arts Entertainment
It Never Rains, Kari Maaren, webcomic
Krampus is My Boyfriend!, S.M. Beiko, Webtoon
Northwest Resistance, Katherena Vermette, ilustrado por Scott B. Henderson, Highwater Press

Mejor poema / canción

Arachnoid Cyst“, Dominik Parisien, This Magazine, Marzo / Abril
Back Story“, David Clink, Strange Horizons, Número 21, Septiembre
The Death of the Gods“, Leah Bobet, Uncanny Magazine #32
Electra“, Y.M. Pang, Arsenika
Hamilton Harbour“, Lynne Sargent, A Refuge of Tales, Renaissance Press
he scores“, Beth Cato y Rhonda Parrish, Star*Line, Summer
Masquerade“, Colleen Anderson, On Spec, Número 115, volumen 31 n 1
Nidhog“, Jo Walton, The Book of Dragons, Harper Voyager

Mejor trabajo relacionado

Augur Magazine, Números 3.1 y 3.2, publicado por Kerry C. Byrne, Alexander De Pompa, y Lawrence Stewen
Disfigured: On Fairy Tales, Disability, and Making Space, Amanda Leduc, Coach House Books
On Spec Magazine, Diane L. Walton, editora, The Copper Pig Writers Society
PodCastle editado por Jen R. Albert y Cherae Clark, presentado por Setsu Uzumé, y producido por Peter Adrian Behravesh, Escape Artists Inc.
Prairie Gothic, editado por Stacey Kondla, Prairie Soul Press
Swashbuckling Cats: Nine Lives on the Seven Seas, editado por Rhonda Parrish, Tyche Books

Mejor presentación visual

Don’t Text Back, Kaye Adelaide y Mariel Sharp, Fantasia Film Festival
Murdoch Mysteries, Temportada 13, episodios 10-18, Christina Jennings, Scott Garvie, Peter Mitchell, Yannick Bisson, y Hélène Joy, Shaftesbury
Trickster, episodios 1-6, Michelle Latimer y Tony Elliott, Streel Films, Sienna Films, and CBC
The Umbrella Academy, Steve Blackman, Netflix
Wynonna Earp, Temporada 4, episodios 1-6, Emily Andras, Seven24 Films Calgary

Mejor artista

Lorna Antoniazzi, portadas de Augur Magazine Números 3.1 y 3.2
Samantha M. Beiko, portadas de Flights of the Marigold, Laska Media Group
Swati Chavda, arte, mapas y portadas de múltiples publicaciones
Dan O’Driscoll, portada de Corona Burning
Maia Kondla-Wolf, portada de Prairie Gothic, Prairie Soul Press

Mejor publicación aficionada

BCSFAzine, Números del #538 al #547, editado por R. Graeme Cameron
Clubhouse, columna semanal de Amazing Stories Magazine, R. Graeme Cameron, online
Polar Borealis, Números del #13 al #16, editado por R. Graeme Cameron
Random Musings, Números del #539 al #547 en BCSFAzine, Robert J. Sawyer
Travelling TARDIS, Jennifer Desmarais, JenEric Designs
Young People Read Old SFF, editado por James Davis Nicoll, online

Mejor trabajo relacionado aficionado

2020 Aurora Awards Ceremony, Mark Leslie Lefebvre y Liz Anderson, evento online
AugurCon, Kerry C. Byrne y Terese Mason Pierre, Augur Magazine Literary Society
ephemera reading series, KT Bryski y Jen R. Albert, ephemera Collective, online
Speculating Canada: Canadian Horror, Science Fiction, and Fantasy, Derek Newman-Stille
When Words Collide, Randy McCharles, presidente, festival online

¡Enhorabuena a los nominados!

Beneath the Twisted Trees

Es una lástima que la saga The Song of the Shattered Sands no sea un poco más conocida, porque lo cierto es que Brad Beaulieu se va superando con cada entrega. No negaré que es necesario cierto esfuerzo por parte del lector para sumergirse en una trama tan compleja y enrevesada, pero el resultado es más que satisfactorio.

Quizá una de las primeras dificultades que nos encontramos al leer esta historia es recordar qué pasó en los volúmenes anteriores, ya bastante largos de por sí. Para solventar este escollo, el autor utiliza dos métodos. El primero, el más común, es dejar a disposición del lector un resumen en el propio libro y en su página web de lo que ha pasado hasta entonces en la historia, no solo en las novelas principales si no también en alguna de las novelas cortas que resultan fundamentales para conocer las motivaciones de algunos de los personajes. Sin embargo, me gustaría hacer hincapié en el segundo, perfectamente integrado en la propia narración y que sirve como ayuda para el lector. A través de los tatuajes que se van haciendo los personajes, principalmente Çeda pero también otros, asistimos también al resumen de la historia, a través los ojos de algunos de los protagonistas. Este método hace que descubramos no sólo qué ha pasado antes, si no que lo vemos a través de la óptica de otras personas, no del narrador habitual, añadiendo una nueva capa de complejidad a la historia. A mi entender, todo un acierto por parte del autor.

Ya había hecho hincapié anteriormente en la exquisita prosa de Beaulieu así que para no repetirme mucho hablaré sobre las relaciones entre los personajes. Me parece muy arriesgada la apuesta del autor por los múltiples puntos de vista que ofrece, ya que hace que no sea fácil seguir la historia. Al principio de la saga con tener más o menos controlada a Çeda podíamos ir enterándonos de la narración, pero ahora, aunque ella sigue teniendo un marcado papel protagonista no es menos cierto que han aparecido otros personajes que captan nuestra atención, tanto entre sus aliados como sobre todo entre sus enemigos. Se van incorporando nuevas facciones a las luchas de poder, no solo entre los doce reyes de Sharakai (o lo que queda de ellos) si no con fuerzas ajenas a la ciudad que ansían poseerla. Hay batallas navales en el desierto, hay magia de sangre y necromancia e intriga, muchísima intriga. Pero no contento con esto, el autor también nos ofrece una visión flexible del amor y de las relaciones interpersonales, todo un muestrario de amor. Fraternal, materno, filial…

También es cierto que el libro, como toda la saga, adolece de ciertos problemas de ritmo. Supongo que es algo inextricable a su propia complejidad, pero hay ocasiones en que parece que la historia no avanza. Es maravilloso recrearse en la contemplación de las dunas y la belleza del desierto o en el intricado diseño de los tatuajes de las tribus, pero cuando una novela ya es de por sí bastante larga, quizá se agradecería no andarse tanto por las ramas en según qué momentos.

Pronto estará disponible la siguiente entrega y no dudo de que volveré a adentrarme en el desierto con interés renovado por la historia.

Gallowglass

He de reconocer que cuando salió anunciada la portada de este libro coincidió con alguna otra de “astronautas tropezando en el espacio” y es por esta razón tan tonta que le presté algo de atención. Cuando me he puesto a leerlo me he encontrado con una novela con algo más de ciencia que de ficción, en la que lo más interesante es el tratamiento de la mecánica orbital de los asteroides, algo que puede resultar atractivo pero probablemente más en un ensayo que en una novela.

Y es que la premisa en la que se basan todas las decisiones del protagonista resulta demasiado difícil de creer. Jack es el hijo de unos multibillonarios interesados en el transhumanismo, lo que implica necesariamente que va a mantener su posición de heredero pero no acceder a nada más durante un periodo de tiempo indefinido. Se supone que por esta causa, o por el cambio climático, o vaya usted a saber por qué esta rebeldía de juventud, decide huir de su cárcel de oro embarcándose en una huida hacia el espacio, el único lugar en el que cree que los contactos y el inacabable caudal de dinero de sus padres no podrá obligarle a volver.

Hablo del cambio climático porque es la entrada de cada capítulo del libro, aunque realmente tiene poca o nula influencia en el desarrollo de la novela. No entiendo por qué está insistencia machacona del autor con el tema, que no digo que no sea relevante, pero no en este contexto.

El libro está dividido en tres partes, la primera es la huida de su vida anterior, ayudado por unos amigos virtuales que tampoco se sabe muy bien de dónde han salido, porque esto de encontrarse hackers por todas partes no debe ser difícil para los muy muy ricos, lo mismo puso una nota en Milanuncios. En la segunda parte, Jack y la tripulación de la nave espacial en la que se embarca intentar recuperar un asteroide para llevarlo a la órbita de la Tierra y poder explotarlo. Y en la tercera ha de afrontar las consecuencias de los actos de la primera y la segunda.

Dejando aparte lo difícil que resulta creer en el idealismo del protagonista, capaz de renunciar a la inmortalidad por sus principios y del martilleo de datos sobre el cambio climático que están metidos con calzador, la novela se desarrolla prácticamente como un thriller, ya que de ciencia ficción hay más bien poco. Está situada en un futuro tan cercano muy verosímil con la única diferencia con la actualidad de los viajes espaciales establecidos y la explotación de colonias lunares y orbitales.

Es difícil empatizar con los personajes porque son egoístas y un poco disfuncionales en sus relaciones humanas, capaces de mandar por la escotilla en un viaje sin retorno a cualquiera que ponga en peligro la misión. A lo mejor esta frialdad es necesaria para la supervivencia, pero cuando el número de personas en la nave espacial comienza a reducirse drásticamente sin que el viaje se vea afectado también se puede pensar que a lo mejor hacían más bien poco perteneciendo a la tripulación desde el principio.

Gallowglass me parece un libro bastante prescindible.

Bear Head

He de reconocer que la primera propuesta de Tchaikovsky que he leído este año, que seguramente no será la última, me ha encantado. Aún siendo una continuación de Dogs of War es de lectura independiente y trata temas muy atractivos en la ciencia ficción, como la colonización de Marte, las inteligencias distribuidas y el control mental. Estamos hablando de especulación a alto nivel, pero no solo en el aspecto tecnológico si no también en el sociológico, algo que me resulta aún más interesante.

No me cabe duda de que también ha influido la excelente labor desarrollada por los narradores del audiolibro, William Hope, Laurence Bouvar y Nathan Osgood, que hacen que te sumerjas más en la historia.

La acción tiene lugar en Marte y en la Tierra. Mientras que en el planeta rojo asistimos a los trabajos necesarios para instalar una ciudad allí, llevados a cabos por humanos modificados y bioformas animales, en la Tierra ocurre algo mucho más siniestro. Un político va ascendiendo en el poder a base de medias verdades y populismo, en un reflejo inquietante de lo que está ocurriendo en la realidad. Pero no es solo eso lo preocupante, lo terrible es la inquebrantable lealtad de su círculo interno y cómo la ha conseguido. A veces me parece que el autor carga demasiado las tintas en esto, dejando a las claras la mentalidad casi infantil del malvado, pero también cómo rodeado de un buen equipo es capaz de salirse con la suya.

Me gusta especialmente el tratamiento del dilema del libre albedrío y la asunción de la responsabilidad tal y como lo propone Tchaikovsky. Aderezándolo con un sentimiento religioso, vemos cómo no hacer nada es hacer algo en sí mismo y las consecuencias que esto puede acarrear. Dejar todas las decisiones y por lo tanto la responsabilidad a un entidad superior es una elección cobarde pero cómoda, a la que se acogen algunos de los personajes del libro. Otros no llegan a tener siquiera esa posibilidad de elección.

Hay algunos elementos que se notan algo forzados para conseguir que la acción avance hasta su punto álgido, como el modo casi milagroso en que se consigue salvar información imprescindible para desenmascarar al malvado o la relativa facilidad con que se desmonta su plan debido a una casualidad, pero son detalles menores comparados con la reflexión a la que nos invita el autor. Para mí, la mejor lectura de lo que llevo de año, pero claro, solo estamos empezando.

Portada de Sistersong

Aquí os traigo la que será portada de Sistersong, la novela de Lucy Holland que Orbit publicará en octubre.

Esta es la sinopsis:

In the ancient kingdom of Dumnonia, there is old magic to be found in the whisper of the wind, the roots of the trees, the curl of the grass. King Cador knew this once, but now the land has turned from him, calling instead to his three children. Riva can cure others but can’t seem to heal her own deep scars. Keyne battles to be seen for who he truly is—the king’s son. And Sinne dreams of seeing the world, of finding love and adventure.

All three fear a life of confinement within the walls of the hold, their people’s last bastion of strength against the invading Saxons. However, change comes on the day ash falls from the sky. It brings with it Myrdhin, meddler and magician. And Tristan, a warrior whose secrets will tear them apart.

Riva, Keyne and Sinne—three siblings entangled in a web of treachery and heartbreak, who must fight to forge their own paths.

Their story will shape the destiny of Britain.

Mi traducción:

En el antiguo reino de Dumnonia, la vieja magia se encuentra en el suspiro del viento, en las raíces de los árboles y en los rizos de la hierba. El rey Cador lo sabía, pero ahora su tierra le ha abandonado, escogiendo a sus tres hijos. Riva puede curar a los demás pero no puede curar sus propias y profundas cicatrices. Keyne lucha por ser visto como quien es realmente, el hijo del rey. Y Sinne sueña con ver el mundo, encontrar amor y aventura.

Los tres temen una vida de confinamiento entre los muros del castillo, el último bastión de su gente frente las fuerzas invasoras sajonas. No obstante, el cambio llega el día que la ceniza cae del cielo. Trae consigo a Myrdhin, entrometido mago. Y a Tristan, guerrero cuyos secretos los destrozarán.

Riva, Keyne y Sinne, tres hermanos atrapados en una re de traición y dolor que deberán luchar para forjar sus propios caminos.

Su historia dará forma al destino de Bretaña.

Esta es la portada con diseño de Lisa Marie Pompilio:

Portada de The God of Lost Words de A. J. Hackwitt

El dos de noviembre se publicará la tercera parte de la serie Hell’s Library, titulada The God of Lost Words. No he empezado a leerla, pero he de decir que la portada de esta última entrega es de esas que entra por los ojos.

Esta es la sinopsis:

Claire, the rakish Hero, the angel Rami, and the muse turned librarian Brevity have accomplished the impossible by discovering the true nature of unwritten books. But now that the secret is out, Hell will be coming for every wing of the library in its quest for power.

To protect the Unwritten Wing and stave off the insidious reach of Malphas, one of Hell’s most bloodthirsty generals, Claire and her friends will have to decide how much they’re willing to sacrifice to keep their vulnerable corner of the afterlife. Succeeding would mean rewriting the nature of the library, but losing would mean obliteration. Their only chance at survival lies in outwitting Hell and writing a new chapter for the Library. Luckily, Claire and her friends know how the right story, told well, can become a revolution.

Mi traducción:

Claire, el vividor Hero, el ángel Rami y la musa bibliotecaria Brevity han conseguido lo imposible al descubrir la verdadera naturaleza de los libros no escritos. Pero ahora que el secreto ha salido a la luz, el Infierno vendrá a cada ala de la biblioteca en su búsqueda de poder.

Para proteger el Ala No Escrita y huir del alcance del insidioso Malphas, uno de lo más sanguinarios generales del Infierno, Claire y sus amigos deberán decidir cuánto están dispuestos a sacrificar para mantener su pequeña y vulnerable esquina de la vida tras la muerte. El éxito implicaría reescribir la propia naturaleza de la biblioteca, pero el fracaso sería el olvido. Su única oportunidad de sobrevivir será ser más listos que el propio diablo y escribir un nuevo capítulo de la Biblioteca. Afortunadamente, Clare y sus amigos saben que la historia adecuada, bien contada, puede traer una revolución.

The Echo Wife

Tengo la impresión de que esta publicación reciente de Sarah Gailey está pasando bastante desapercibida y es injusto, porque nos encontramos ante una obra de ciencia ficción especulativa que si bien utiliza un recurso muy manido como es la clonación humana, es capaz de conjugar el tratamiento de la moralidad en los experimentos científicos con las relaciones personales de una forma sobresaliente.

Evelyn Cadwell es una investigadora de gran éxito en el campo de la clonación humana. Está totalmente volcada en su investigación, así que deja pasar varias señales de que su marido, que colaboró con ella en el principio de su carrera, es infiel. Lo sorprendente es que con quien está teniendo una aventura es un clon de ella misma, modificada para limar las asperezas e inconvenientes que presentaba en su relación. Sin embargo, todo cambia cuando recibe la llamada de Martine, su propio clon, solicitando su ayuda por algo que ha ocurrido con su marido.

Lo que más llama la atención de la novela que nos ofrece Gailey es la crudeza con la que expone los sentimientos de los personajes. Quizá estamos acostumbrados a que en el mundo real todo tenga una capa de edulcorante para ayudarnos a pasar mejor los malos tragos, pero Gailey habla sin tapujos. En el campo de la clonación humana y cuando Evelyn habla de su investigación, los “sujetos” no son considerados seres humanos, son solo especímenes con los que experimentar. Y si para condicionarlos hace falta extirparles un miembro o someterles a algún otro procedimiento cruel, todo se lleva a cabo de una forma tan aséptica e impersonal que nos hace dudar sobre la humanidad del propio científico.

Esta frialdad extrema de Evelyn también se ve reflejada en su relación con el resto del mundo, desde su marido que se siente abandonado por su dedicación a la investigación a la ristra de ayudantes que va quemando a lo largo de los meses. Y sin embargo, a lo largo de la novela iremos viendo que todos estos actos son la consecuencia de una infancia subyugada que poco a poco se irá desvelando. No es que su comportamiento tenga justificación, pero sí podemos llegar a entender las causas.

Pero no es solo el comportamiento de Evelyn el que nos resultará repulsivo, es que casi todos los “humanos verdaderos” (por distinguirlos de los clones) tienen una bajeza moral que resulta fascinante pero que debería hacer saltar todas las alarmas.

No deseo extenderme más en la trama de la novela, porque creo que es mejor ir descubriendo las pequeñas sorpresas y giros de guion que Gailey ha ido sembrando por esta excelente obra. Considero importante poner el foco en la especulación sobre las posibilidades de la clonación y la responsabilidad moral en la creación de estos sujetos, algo sobre lo que le misme autore hace bastante hincapié. Es un libro relativamente corto pero que hay que leer de forma pausada para reflexionar sobre estos temas.

Me gustaría destacar la labor de la narradora del audiolibro, Xe Sands, que consigue que consigamos empatizar con una protagonista fría y con un comportamiento en ocasiones despreciable, en un relato que transcurre sobre todo en el interior de su cerebro. Los diálogos que hay también están bien representados, pero es ese soliloquio interior y la manera de contárnoslo lo que me ha hecho reparar más en la calidad de la narración de Sands.

Immunity Index

Hay veces en las que las novelas, sobre todo las especulativas, se adelantan a la realidad, como por ejemplo A Song for a New Day de Sarah Pinsker. Pero, y ahora lo estamos viendo más, algunas veces la realidad se adelanta a la novela. Esto le ha pasado al nuevo lanzamiento de Sue Burke, Immunity Index, que gira entorno a una infección mortal por un coronavirus en EE.UU. y las consecuencias políticas, sociales y económicas que esto conlleva.

Como ya digo, es imposible leer esta novela sin retrotraerse al estado actual de la pandemia y comparar qué ha pasado en la realidad con lo que imaginó la autora. Burke nos presenta un cuadro mucho más terrible, primero porque una de las cepas del virus es tiene una tasa de mortalidad tremendamente alta y después porque el estado político del país es mucho más convulso. Se trata de una novela coral, que hace también hincapié en otro aspecto, el de la manipulación genética en general y la clonación humana en particular, que es quizá la parte más interesante de la narración.

El libro es una alabanza a la insurrección ciudadana contra la opresión gubernamental, aunque las ideas que expone son un tanto inocentes, ya que sería de esperar una represión mucho más brutal por parte de un presidente y su camarilla capaces de idear ataques contra la salud pública con tal de mantener su puesto. Pero para captar estos mensajes, hay que entrar en el juego de Burke, que nos muestra el patriotismo tal y como se entiende en EE.UU. algo que no tiene nada que ver con lo que se puede entender en otros países. Y el hecho de que haya personas capaces de sacrificar su vida para ayudar a los demás no quita que haya otras que se crean investidas de derecho divino a obrar como les plazca. A principios de año fuimos testigos de una versión mucho más moderada de esto, y por lo tanto, el libro se vuelve aún más creíble.

Me hubiera gustado más protagonismo para el científico encargado del estudio del virus y de las estrategias para su anulación. Me parece que se pasa un poco de puntillas por el tema dando más importancia a la parte política, cuando a mi entender sería más atractivo desarrollar más este personaje y la justificación de sus acciones.

Immunity Index es una novela tan actual que el propio entorno en que se desarrolla puede jugar en su contra, ya que no todo el mundo puede tener ganas de leer algo que a lo que podría asistir asomándose por la ventana. Es por tanto difícil recomendarla en la actualidad.