How to Steal a Galaxy

Los libros de Beth Revis de la saga Chaotic Orbits son un desengrasante perfecto entre lecturas más sesudas. Aunque How to Steal a Galaxy está muy, pero que muy afectado por el síndrome del segundo libro, su tono irreverente y la rapidez de su trama hace que se lea con una rapidez inusitada y con una sonrisa en la boca.

De nuevo seguimos los pasos de Ada Lamarr, contratada en esta ocasión para robar “algo”, no sabemos exactamente, bajo las mismas narices de Ryan, el agente del Gobierno a quien ya consiguió burlar y atraer al mismo tiempo en Full Speed to a Crash Landing. Toda la novela corta se comprime en apenas unas pocas horas de preparación (o eso creemos) para el timo, tiempo que Revis usa sabiamente para ensalzar aún más la figura de su protagonista y de paso criticar muy duramente a los millonarios “hechos a sí mismos” que parece que van a poblar también nuestro futuro, con planes medioambientales de dudosa procedencia y aún más turbio resultado. Un poco como la ciencia ficción de futuro cercano de The Future de Naomi Alderman, pero menos pegado a la actualidad.

Si bien es cierto que la novela mantiene el ritmo más o menos durante todo su desarrollo, no es menos cierto que en algunos momentos se hace bastante previsible, algo maniquea y menos divertida que la primera, aunque sigo disfrutando enormemente de las notas a pie de página y en general, de la personalidad caleidoscópica de Lamarr.

Creo que en cuanto que esté disponible la tercera parte, la leeré. Sobre todo, para ver en qué queda todo esto pero también para poder valorar la serie como un todo y no solo como la suma de las, por otra parte desiguales, partes.

Polostan

Aunque mis experiencias más recientes con Neal Stephenson me dejaron un sabor agridulce, siempre es un acontecimiento la aparición de una nueva novela suya. Además, con Polostan vuelve a la ficción histórica, a hacernos testigos de la historia de la ciencia con es capacidad divulgativa que le caracteriza, lo cual me agrada sobremanera. Existe un extenso artículo de Cory Doctorow etiquetando claramente al libro como ciencia ficción y aunque no estoy segura de compartir su visión del género, sí que he de decir que he disfrutado mucho de la lectura del libro, que creo que es lo más importante.

En Polostan seguiremos los pasos de Dawn Rae Bjornberg, cuyos orígenes a caballo entre EE.UU. y la URSS a principios del siglo pasado la convierten en una testigo de excepción de los acontecimientos que desencadenaron la creación de la bomba atómica. Esto no se indica per se en el libro, pero queda bastante claro por los personajes con los que se va encontrando, especialmente es misterioso Dick al que seguro que en las siguientes entregas volveremos a ver. También ayuda la cubierta y el título de la serie.

La novela ciertamente parece un prólogo de todo lo que vendrá después y quizá ese sea su principal defecto, que aunque se sostiene bien como historia, tiene un aire de incompletitud sobre todo con el abandono de algunos personajes in media res. Salvando este escollo y pensando en los siguientes volúmenes, la verdad es que como trama introductoria está magníficamente desarrollada.

Hacía referencia antes a la facilidad pasmosa con la que el autor es capaz de hacer que resulte interesante cualquier cosa, desde un proceso de fundición de metal hasta un deporte de élite como el polo, pasando sin despeinarse (aunque en el caso de Neal sería imposible) por el descubrimiento del neutrón o la Exposición del progreso de Chicago de 1933. El libro fluye entre explicaciones de física y datos históricos curiosos sin hacerse pesado en ningún momento.

Además, la trama política y de espionaje se cohesiona con las demás de una forma exquisitamente homogénea. Stephenson da voz a bolcheviques, mencheviques, anarquistas, fascistas… haciendo un recorrido por gran parte del espectro de izquierdas y derechas, mostrando sus contradicciones y el por qué de los fanatismos, buscando la sencillez que impacta por sí misma.

Tengo muchísimo interés en vez qué le deparará a Dawn o Aurora el futuro que le espera.

Cubierta y sinopsis de Volatile Memory

Aquí os traigo la que será cubierta así como la sinopsis de Volatile Memory, una novela corta de ciencia ficción, el debut en el género de Seth Haddon, que Tor.com publicará en julio del año que viene.

Esta es la sinopsis:

With nothing but a limping ship and an outdated mask to her name, Wylla needs a big pay day. When the call goes out that a lucrative piece of tech is waiting on a nearby planet, she relies on all the swiftness of her prey animal instincts to beat other hunters to it.

What you found wasn’t your ticket out—it was my corpse wearing an AI mask. When you touched the mask, you heard my voice. A consciousness spinning through metal and circuits, a bodiless mind, spun to life in the HAWK’s temporary storage. I crystallized and realized: I was alive.

Masks aren’t supposed to retain memory, much less identity, but the woman inside the MARK I HAWK is real, and she sees Wylla in a way no one ever has. Sees her, and doesn’t find her wanting or unwhole.

Armed with military-grade tech and a lifetime of staying one step ahead of the hunters, Wylla and HAWK set off to get answers from the man who discarded HAWK once before: her ex-husband.

Mi traducción:

Con nada más que una nave renqueante y una máscara pasada de moda, Wylla necesita ingresos desesperadamente. Cuando se corre la voz de que una lucrativa pieza de tecnología está esperando en un planeta cercano, confiará toda a la rapidez de sus instintos de animal de presa para llegar antes que los demás cazadores.

Pero lo que encontraste no fue una salida sino un cadáver con una máscara de IA. Cuando tocaste la máscara, escuchaste mi voz. Una conciencia que se mueve entre el metal y los circuitos, un mente sin cuerpo, traída a la vida en un almacenamiento temporal. Me cristalicé y me di cuenta de que estaba vivo.

Se supone que las máscaras no deben conservar memorias, mucho menos identidades pero la mujer dentro de la MARK I HAWK es real y vez a Wylla como nadie nunca lo hay hecho. La ve y no la considera menospreciable.

Armada con tecnología militar y con la experiencia de toda una vida manteniéndose por delante de los perseguidores, Wylla y HAWK emprenden la búsqueda de respuestas por parte del hombre que ya se deshizo de HAWK: su exmarido.

Esta es la cubierta:

On Vicious Worlds

Tenía bastante interés en ver cómo se desenvolvía Bethany Jacobs en la segunda entrega de la trilogía Kindom, porque These Burning Stars me gustó bastante en su momento, pero me temía que no le quedaran cartas para jugar en la continuación. Y es que los cambios y giros de guion impactantes de la primera entrega dejaban poco margen de sorpresa para la segunda, algo que he constatado con la lectura. Esto no implica que no me haya gustado, pero me ha dejado menos marca que la anterior, sin duda afectado por el síndrome del segundo libro.

El comienzo de la novela es arrollador, como se enseña en todas las escuelas de escritura, volviendo a colocarnos en medio de las intrigas políticas que caracterizan a la trilogía, si bien no en la propia historia porque Jacobs da por hecho que nos acordaremos de todo el elenco de personajes y sus relaciones. Gracias por la confianza Bethany, pero algunas ya no estamos para acordarnos de todos los libros que nos leemos.

La narración se divide en dos líneas temporales condenadas a encontrarse, en un clásico movimiento de reunificación de tramas y personajes para dejarlo todo preparado para el final de la trilogía. En este aspecto la autora ha apostado por la seguridad más que por la innovación, pero está bien llevada.

Me han convencido algo menos los “momentos hacker” tanto de Jun como de otros personajes, porque la verdad me acaba cansando que los complejísimos sistemas de seguridad se puedan asaltar sobre la marcha mediante “magia”. En cambio, creo que la autora se luce más cuando narra cómo las relaciones entre personajes se van complicando y entra en mayor profundidad, sin dejar de lado la denuncia social de la que ya hizo gala con anterioridad. Es un libro algo denso, pero la autora hace hincapié en algunos aspectos sociales para que no nos olvidemos de cuál es el objetivo de la obra.

En definitiva, se trata de un libro algo lastrado tanto por lo apabullante que era el anterior como por la preparación del terreno para el siguiente, pero que merece la pena leer como componente fundamental de la serie al completo.

Rise of the Red Hand

Recuerdo que cuando se publicó Rise of the Red Hand hubo cierto revuelo en redes sobre el libro, sobre todo porque había mechas y un cierto aire reivindicativo en la obra. Lo cierto es que una vez apaciguadas las aguas tras tres años desde su publicación, Rise of the Red Hand no ha dejado mucha huella pero no por ello deja de ser una novela destinada al público juvenil que tiene detalles interesantes. Veamos algunos de ellos.

Creo que quizá lo más llamativo sea la ambientación futurista de esta distopía climática, situada en el sudeste asiático. Si bien es cierto que ya asistimos a una ambientación similar en La Chica Mecánica, no es menos cierto que se agradece el cambio de las omnipresentes megaciudades norteamericanas. La autora ha sabido de dotar de un sabor especial al libro, con referencias religiosas, culturales, gastronómicas que se salen de lo habitual.

La subida del nivel del mar en el futuro ha provocado migraciones humanas que han aumentado aún más si cabe las desigualdades entre los privilegiados y los demás. El movimiento de resistencia es la Red Hand, un sistema distribuido de protestas y activismo que pretende la redistribución de la riqueza. El mundo está fracturado en provincias tras la tercera guerra mundial y ese es quizá uno de los puntos que fallan del libro, ya que no se explica muy bien cómo ha podido sobrevivir la civilización aunque sea de una forma maltrecha a las armas nucleares. Olivia Chadha no entra muy en detalle, colocando las piezas donde le interesan para narrar su historia y dejando a la suspensión de la incredulidad del lector los huecos que quedan en el relato.

En el libro hay varios puntos de vista bastante equilibrados, con representantes de la Red Hand muy influidos por el cyberpunk y las modificaciones corporales extremas para poder sobrevivir y también otros que parten desde el privilegio de sus genes perfeccionados para una vida de comodidad y lujo. Las decisiones sobre quién vive y quién muere las toma una inteligencia artificial basándose en juicios de valor irremediablemente sesgados por los humanos. Es difícil sentir empatía por los personajes al comienzo del libro, pero luego se dejan querer.

En cuanto a la prosa, es un aspecto al que no le hubiera venido mal un poco de más trabajo editorial, porque hay algunos pasajes de puro infodump que no aportan nada a la historia.

En definitiva un libro que prometía más de lo que ofrece, pero que se salva de la quema por detalles que quizá se expandan en Fall of the Iron Gods.

Gollancz adquiere los derechos de The Republic of Memory

Gollancz ha anunciado la adquisición de un duología árabefuturista obra de Mahmud El Sayed. Quizá os suene el nombre del autor como ganador del 2023 Future Worlds Prize for Fantasy and Science Fiction Writers of Colour.

Sobre el primer libro, comentan que se trata de un trabajo apabullante de árabefuturismo en la nave generacional Safina durante un periodo de mucho inquietud, con la nave sufriendo apagones aparentemente aleatorios y la tripulación muy dividida. El autor afirma que se inspiró en la Primavera Árabe para escribir su obra.

The Republic of Memory se publicará en primavera de 2026.

Broken Stars

Jeremy Szal es un joven escritor conocido por Stormblood y su continuación, Blindspace. Con Broken Stars, su autopublicada recopilación de relatos, nos ofrece una perspectiva sobre su obra corta y su desarrollo como autor.

The Galaxy’s Cube

Creo que este primer relato ya nos va dando una idea de los puntos fuertes de Szal, como los sentimientos y las relaciones interpersonales, aunque peque de poco original en la concepción y en el desarrollo de este relato anticapitalista.


Dead Men Walking

Este relato podría haber encajado perfectamente en la recopilación Armored que reseñé tiempo atrás. El escritor nos hace sentir como propias la camaradería y el compañerismo de los efectivos militares, pero añade un giro cruel al final para hacernos reflexionar.


Tomorrow, the Sunset Will Be Blue

Corto y sentimental, pero con una resolución demasiado parecida al anterior. Quizá le hubiera venido mejor otra posición en el orden de lectura del recopilatorio.


Scream in Blue

Primera aparición de la invención estrella del autor, la stormtech. Y es un relato completo, de los más largos de Broken Stars. La historia se desarrolla en un Londres del futuro, pero en los bajos fondos donde sobreviven como pueden los menos afortunados, la plaga de la adicción comienza a propagarse. Tenemos grandes ejemplos de acción con escenas de parkour hipervitaminadas, pero también reflexiones sobre por qué la vida merece ser vivida. Creo que es un extraordinario ejemplo de la forma de escribir del autor australiano.


Walls of Nigeria

Corto pero muy intenso, la historia del sacrificio que supone que te dejen atrás para proteger el futuro con ese toque de ciencia ficción y un poco de body horror características de Szal.


A Love Like Bruises

Un concepto sorprendentemente parecido al usado en Intermnemosis pero con un planteamiento más crítico y un final más cruel.


Beneath a Bicameral Moon

Recuerda a Enemigo Mío aunque con algo menos de carga emocional y algo más de manipulación.


Metal Empathy

Una historia de amor y libertad, protagonizado por cyborgs que se intercambian partes no perfectamente compatibles y que se ven forzados a despedirse de su libertad por errores del pasado.


The dataSultan of Streets and Stars

Quizá lo que más me gusta del relato es la ambientación en Estambul y las referencias al lugar en una historia de despertar de la inteligencia artificial y venganza.


Oceans like Neurons

Interesante ver cómo se siente la protagonista al intentar acceder a una mente colmena que le había estad vedada hasta la llegada de una tecnología alienígena.


Mindstrings

Un relato bastante duro sobre las adicciones aunque transportadas al futuro, la búsqueda del siguiente y la desesperación de no conseguirlo es atemporal.


Shipmaster’s Scalp

Otra de las obsesiones de Szal es la lealtad al grupo y este cuento es un ejemplo perfecto de cómo lo considera una de las virtudes más importantes.


Ark of Bones

Creo sinceramente que en este relato el autor se pasa de frenada en cuanto a las diferencias entre los buenos y los malos, no hay ninguna escala de grises, es ponernos frente a la maldad absoluta del racismo.


The Bronze Gods

Un relato que parece muy inspirado por la Hermandad del Acero de la saga Fallout pero retorciendo sus ideales. A veces cansa ver siempre la misma historia una y otra vez.


Stars in a Grave, Stars in a Skull

Me ha gustado mucho el comienzo de Stars in a Grave, Stars in a Skull que apuntaba a un poco de terror, pero me he llevado un poco de chasco con la resolución.


When There’s Only Dust Left

Decepcionante cuento sobre manipulación mental para tortura.


Traumahead

Un recorrido por el campo de batalla adquiriendo recuerdos de los caídos buscando algo que es imposible encontrar porque ya se perdió en el tiempo. Bastante emotivo.


Inkskinned

Quizá lo que más me ha gustado de la colección, por su manera de explicar la asimilación de una cultura desde el punto de vista del asimilado.


The Black Horse

Un buen colofón para una antología quizá demasiado larga y repetitiva, una aventura fantástica alejada de la ciencia ficción que deja buen sabor de boca al lector.

Me hubiera gustado que Szal hubiera hecho una selección más corta de su obra, porque como es patente en la lectura de la reseña, hay algunos relatos que se parecen demasiado los unos a los otros. Mejor leer Broken Stars a pequeños sorbos para no saturarse.

El último asesinato en el fin del mundo

Siempre es un placer leer algo nuevo de Stuart Turton, el escritor que se hizo un hueco en estante de favoritos con The Seven Deaths of Everlyn Hardcastle y lo amplió con The Devil and the Dark Sea. Además en esta ocasión he podido leer la versión en castellano, traducida por Marta Rebón y publicada por Ático de Libros, con una edición física preciosa.

En este novela Turton abraza definitivamente la ciencia ficción, con la que ya coqueteó en su primera novela. El libro se sitúa en un escenario postapocalíptico, la población mundial ha caído víctima de la Niebla, una extraña amenaza que destruye todo lo que toca y que se ha expandido por la Tierra a velocidad de vértigo. Solo quedan supervivientes en una isla griega que antaño cobijó un laboratorio de ultimísima tecnología. Los que allí habitan se dividen en dos categorías, los Ancianos que sobrevivieron a la catástrofe y que gracias a sus modificaciones genéticas y nanobots son extremadamente longevos y los lugareños, que no poseen estas ventajas. En esta tesitura, sucede un acontecimiento que puede acabar con lo que resta de la humanidad.

El último asesinato en el fin del mundo es un libro del que no resulta fácil hablar sin destrozar el argumento y las sorpresas con las que el autor ha plagado su obra. Pero se puede decir sin problema que es un misterio de habitación cerrada, si entendemos como habitación cerrada toda la isla rodeada por la Niebla, claro. En este sentido Turton utiliza el mismo modelo que en sus otras novelas, pero con grandes cambios.

El primero es el narrador omnisciente pero no confiable con el escoge exponer la situación. Con este comodín en su mano, es capaz de dosificar la información de manera magistral para que lector no pueda ir nunca por delante suya, acelerando o ralentizando la investigación a su antojo.

El segundo es la inquietante cuenta atrás hacia el fin de la humanidad que se desencadena al principio del libro y que nos traerá en vilo durante todos los capítulos.

El tercero es la introducción de la tecnología más puntera que modifica las que serían las normas del juego más tradicionales en una investigación de asesinato.

El libro tiene algunos detalles que me han gustado menos, como la frialdad con la que se desarrollan los acontecimientos, probablemente justificada por las circunstancias y los implicados, imponiendo una distancia empática entre el lector y los personajes. Pero son detalles que no me han impedido disfrutar de una obra estupenda, que recomiendo encarecidamente.

The Family Experiment

Llegué a The Family Experiment un poco por casualidad, John Marrs no es un autor que haya pasado cerca de mi radar, algo de lo que me arrepiento porque al menos esta obra me ha cautivado. Se podría categorizar más como thriller que como ciencia ficción, pero es indudable su valor especulativo y su proyección del Reino Unido en un futuro cercano que es tan frustrante y desesperanzador como plausible.

En lo primero en que me gustaría hacer hincapié es en los extraordinarios valores de producción del audiolibro, ya que no han faltado medios para disponer de diversos narradores para cada punto de vista, e incluso hay intervalos musicales, sonidos FX y demás parafernalia para hacer de la audición una experiencia muy inmersiva.

The Family Experiment es el nombre de un nuevo reality show que ofrecerá a los participantes la oportunidad de criar un hijo virtual, con crecimiento acelerado durante los meses que dure el concurso pudiendo obtener como premio la permanencia de esa descendencia virtual o un jugoso premio económico que se podría destinar a tratamientos de fertilidad. Como en todo reality show que se precie, los concursantes pasan por un proceso de criba que busca los que mas impacto puedan causar en el espectador para conseguir la máxima audiencia posible. Hasta aquí nada nuevo.

Lo que nos ofrece Marrs es una especulación sobre los extremos a los que son capaces de llegar los humanos cuando se enfrentan a situaciones límite y, sobre todo, cuando no se cuenta con el apoyo de un Estado del bienestar que amortigüe los impactos. Como terrible trasfondo, la venta de niños hacia Europa por parte de padres desesperados que no pueden hacerse cargo de su manutención, la adicción a las drogas de diseño, la absoluta falta de moral de las empresas que desarrollan la IA con el sufrimiento humano y más y más depravaciones que resuenan en nuestro cerebro como falsas, pero creíbles. La denuncia social vestida de entretenimiento para masas es una baza que el autor de Northamptonshire utiliza de forma muy acertada.

El ritmo es excelente desde el principio, in crescendo conforme se van conociendo el pasado de los participantes, que obviamente es bastante más turbio de lo que su fachada exterior podría dar a suponer. El libro funciona como una obra de relojería, aumentando la tensión conforme van quedando menos familias en la contienda, como todo concurso de popularidad que se precie. Y hay que admitir que el autor no deja nada sin explicar, con unos capítulos finales en los que seremos testigos del modus operandi aplicado en cada caso, dando una solución tan perfecta y ajustada que la verdad, le quita un poco de alma al libro.

The Family Experiment ha sido toda una sorpresa para mí y además una muy agradable.

Cubierta y sinopsis de Terms of Service

La primera obra de Ciel Pierlot me llamó mucho la atención, así que me parece una gran noticia el anuncio de la publicación de Terms of Service, que Angry Robot nos traerá el 10 de junio de 2025.

Esta es la sinopsis:

Luzia N.E. Drainway never really thought too much about the Astrosi. They lurk above and below Bastion City – a giant multileveled megalopolis she calls her home – and they tend to keep to themselves. On the rare occasions they use their magics to meddle with human affairs, most people with an ounce of sense steer clear of whichever unfortunate soul happens to be their victim. Luzia is far too dedicated to repairing and maintaining the frequently-damaged Bastion to pay them much attention, and prefers to ignore the Astrosi just like everyone else.

That disregard gets blown out of the water when a rogue Astrosi and nefarious trickster named Carrion kidnaps her nephew and sells him to the Eoi, one of the Astrosi courts. 

With no other options to save her nephew, Luzia trades her life for his and finds herself in service to the Eoi. Unfortunately for her, Astrosi logic is acrobatic in ways even the most devious human mind can barely comprehend. It’s not until the deal is struck that she realizes she’s trapped in the most abstruse verbal contract imaginable. She is essentially conscripted into their ranks, and her devotion to her city becomes stretched to breaking point by her new masters’ orders. 

As she struggles under this weight, she begins to uncover the secrets of the Astrosi people – the internal battles for power between the two kingdoms, the never-ending conflict between them, the trickster Carrion who somehow bridges that gap, and the very nature of the Bastion itself.

Mi traducción:

Luzia N.E. Drainway nunca dedicó mucho tiempo a pensar en los Astrosi. Viven alrededor de Ciudad Bastión (una megalópolis gigante de varios niveles que es su hogar) y normalmente no se meten en asuntos ajenos. En las pocas ocasiones en que usan sus poderes mágicos para interferir en los asuntos humanos, la gente con una pizca de sentido común se mantiene alejada de la desafortunada víctima. Luzia está demasiado implicada en el mantenimiento de Bastión como para prestarles mucha atención, así que prefiere ignorarles como el resto de la gente.

Ese desdén desaparecerá enseguida cuando un Astrosi huido y nefasto embaucador llamado Carrion secuestra a su sobrino y lo vende a los Eoi, una de las cortes Astrosi.

Sin otra opción para salvar a su sobrino, Luzia cambia su vida por la de él y se pone al servicio de los Eoi. Desafortunadamente, la lógica Astrosi es flexible de manera incomprensible para un humano. Hasta que acepta el acuerdo, no se da cuenta de que está atrapada en el acuerdo verbal más abstruso posible. Básicamente, es una esclava y su devoción por su ciudad se verá muy apurada por las órdenes de sus nuevos señores.

Mientras sufre bajo esta carga, empieza a descubrir los secretos de los Astrosi: sus peleas internas por el poder entre los dos reinos, el conflicto inacabable, los tejemanejes de Carrion y la propia naturaleza de Ciudad Bastión.

Esta es la cubierta: