John Scalzi es un escritor prolífico que tiene las cosas muy claras y así las expone en su blog. Este libro consta de artículos seleccionados de esta publicación, por lo tanto si lees Whatever con cierta constancia te encontrarás cosas que recuerdas.
Don’t Live for your Obituary tiene todo lo bueno de los post de un blog exitoso. Los artículos que lo componen son directos, cortos y van muy al grano, lo cual es de agradecer. La brevedad y la concisión son aspectos importantes a la hora de escribir online, donde nuestra capacidad de atención se diluye a los pocos párrafos. Scalzi lo consigue de un modo directamente heredado de su pasado como periodista.
Existe cierta repetición en los temas tratados, como las polémicas con los Puppies, pero de forma general es una lectura muy ágil. Para evitar esta reiteración, también se puede optar por intercalar cada artículo con otro tipo de lecturas. El formato en el que se presenta se da mucho a ello, incitanto a la lectura de algunos artículos y pudiendo dejar los demás para después.
El libro está enfocado principalmente a una persona que quiera desarrollar una carrera como escritor, así que muchos de los consejos tienen en mente un autor, pero lo cierto es que la mayoría de los temas financieros de los que habla Scalzi son de sentido común (no gastes más de lo que tienes, ojo con las tarjetas de crédito, el dinero que no has recibido todavía no es tuyo…). Algunos son de un obvio que sorprende, pero también es verdad que por lo general no tenemos la cultura financiera que necesitaríamos (me incluyo en el conjunto).
Para mí, los artículos más interesantes son los referidos al mundo de la publicación en sí. La relación con los editores, la gestión de los contratos, las posibilidades de vender los derechos para producciones audiovisuales… es un tema del que no se habla apenas pero que a mí me resulta fascinante. Me temo que no es extrapolable al mundo editorial español, por pura economía de escala, pero no deja de ser culturizante.
También hay alguna que otra referencia al ego y la riqueza de Scalzi, que sin ser un potentado económico si que tiene una situación desahogada, ganada a base de teclear. Leyendo sus escritos la idea general es que Scalzi es un tipo majo, pero precisamente hay un artículo sobre la persona que proyecta y la persona que es en realidad, así que…
En general la lectura es amena aunque de interés variable. Entiendo que su público objetivo principal pueden ser escritores o aspirantes a serlo, pero creo que cualquiera con interés en el mundo editorial en general y en el género fantástico en particular puede disfrutar de Don’t Live for your Obituary.