Como ya habréis podido comprobar en algunos artículos anteriores, me gusta escuchar podcasts sobre literarura fantástica y ciencia ficción y aprovecho los pocos momentos de los que dispongo para colocarme los cascos. La principal dificultad con la que me encuentro es que la mayoría de estos podcasts son en inglés y tengo que afinar mucho el oído para entenderlo todo, aunque los participantes tengan la dicción clara. La culpa no es suya, por supuesto, es de mi comprensión. Por esto, representa todavía un placer más grande poder escuchar hablar de mis géneros favoritos en español.
Los VerdHugos son cuatro amigos que se juntan de vez en cuando para charlar sobre ciencia ficción y fantasía, y aunque en un principio esta conversación estaba orientada a hablar de los premios Hugo (hay una pista en el nombre), en general la conversación puede tomar otros derroteros tanto o más interesantes. También se aceptan colaboraciones, los llamados VerdHugos Jr. donde algún invitado puede comentar un libro o hacer anuncios relacionados con el mundillo.
También realizan algunas lecturas conjuntas de relatos en las que es bueno participar, es recomendable leer simultáneamente con otras personas porque enriquece mucho la experiencia lectora y te ayuda a ver aspectos de las obras que quizá a ti te habían pasado desapercibidos.
La última incorporación han sido las recomendaciones que hacen al final del podcast sobre libros para leer, que siempre es algo interesante viniendo de gente que conoce el paño. También es cierto que si sabemos qué es lo que le gusta a cada uno de los VerdHugos podemos afinar nuestra elección escogiendo al que esté más en sintonía con nosotros.
La duración es variable. Las conversaciones no se ajustan a un guión, aunque parece que sí tienen unas guías a las que no hacen mucho caso, pero no es importante.
La producción del podcast es correcta, se oye con mucha claridad y aunque a veces hay ruidos de fondo esto no entorpece la escucha. La única pega, por poner alguna, es la periodicidad cuando menos aleatoria con la que aparecen los capítulos, debido seguramente a las apretadas agendas de los contertulios.
Son unas grabaciones muy recomendables para cualquier interesado en la llamada literatura prospectiva.