Creo que ya ha quedado claro que en esta casa nos gusta mucho KJ Parker así que cada publicación suya es un pequeño acontecimiento y más si viene seleccionada por Jonathan Strahan.
Prosper’s Demon es una novela corta que trata sobre los temas habituales en la obra del autor, tales como la redención y la culpa con su carga moral con algunas gotas de ingeniería que es lo que se ve que le apasiona. Existen referencias a sus sospechosos habituales como Saloninus y el Sol Invencible, pero se puede leer perfectamente de forma independiente, como gran parte de su obra.
Usando la figura del narrador no confiable en primera persona, Parker nos muestra un mundo donde las posesiones demoníacas están a la orden del día, pero como cada acción tiene su reacción, también hay humanos que se especializan en expulsar a estos demonios, que tendrán que buscar un nuevo inquilino. Con un humor bastante negro y sin dejar de lado los detalles más suculentos, el autor nos va contando cómo el narrador conoció su don, cómo lo utiliza y a qué problemas se ve expuesto. El comienzo es demoledor, y aunque pierde algo de fuelle hacia la mitad de la lectura, se recupera con un gran final.
El demonio al que hace referencia el título es el que ha poseído a Prosper de Schanz genio polifacético que ha decidido dedicarse a la crianza del heredero del reino desde su concepción, para conseguir el regente perfecto. ¿Permitirá nuestro protagonista esta labor o impedirá de alguna forma los planes de los demonios? Pero si lo hace, ¿no estará arruinando el futuro del reino?
Se puede leer tan rápido que puede que nos perdamos detalles de la excelencia en la técnica de escritura de Parker, que no hace si no volver a demostrarnos cómo controla las distancias cortas , a mi entender más que las novelas propiamente dichas, en las que se pierde un poco de la fuerza de su prosa y sus ideas.