Pedí consejo sobre qué libro leer a continuación de The Emperor’s Soul y por aclamación popular (de dos personas) fue elegido Scourge of the betrayer. La próxima vez les voy a pedir consejo a los mismos porque la verdad es que me ha gustado.
La historia la cuenta Arkamondos, un joven que es contratado como escriba por un grupo de Syldoons, guerreros de renombre en misión secreta. Aunque este personaje puede parecer arquetípico, le sirve al autor para evitar el uso del narrador omnisciente, y que el lector tenga que enfrentarse a las mismas confusiones que sufre él, que serán muchas.
Los personajes que más me han llamado la atención son dos aparentemente opuestos pero unidos por una lealtad inquebrantable por un lado y una necesidad imperiosa por el otro. Estoy hablando del capitán Braylar y de Lloi. El primero es el jefe de los Syldoons y la segunda es una mujer mutilada de oscuro pasado. Arky el escriba acabará aprendiendo por las malas lo que es la vida del soldado, pero dentro de lo que cabe no saldrá muy mal parado, al menos físicamente. El aspecto psicológico ya es otro cantar.
A pesar de caer en muchos lugares comunes de la fantasía (armas malditas, emboscadas, ligeros toques de magia y traiciones, muchas traiciones) el tratamiento es original y está bien llevado sobre todo para ser una primera novela. El ritmo a veces es endiablado y a veces decae, adecuándose a lo que va ocurriendo en el relato pero dejándome descolocada. Puede ser también por que el autor oculta muy bien sus cartas.
Las escenas de lucha están muy bien descritas aunque a menudo Jeff Salyards se recrea en el gore, por ejemplo en la escena de la conversación que se mantiene en la cámara de tortura. Parece una tendencia actual en el género que la sangre te tenga que salpicar mientras estás leyendo.
El final no es satisfactorio en el sentido de que la mayoría de las tramas que se urden quedan sin resolver, así que espero ansiosa el siguiente libro. A ver si descubrimos más cosas sobre el Veil. De momento, ya ha salido la portada.
Relacionando esta lectura con los premios Hugo de este año Jeff Salyards puede ser nominado para el premio John W. Campbell y creo que se ha ganado mi voto.
Me alegro de que te haya gustado. No es un libro perfecto, pero para mí supuso una muy agradable sorpresa. Y también voy a votar a Salyards para el Campbell.
Tiene sus cosas, pero como todos. Supongo que el siguiente nos ayudará a “medir” a Salyards como escritor.
Como estilista yo lo veo muy, muy bien. La prosa está muy trabajada y no parece un autor novel. Lo que le falla un poco, como dices en tu reseña, es el ritmo. Pero yo creo que el segundo libro va a ser un poco más movido y va a superar ese problema.
Y encima simpático.