Conocí a la sudafricana Lauren Beukes con su libro The shining girls con el que disfruté a la vez que lo pasé fatal. Esta escritora tiene una gran capacidad para reflejar el sufrimiento humano y es capaz de llegarte muy adentro. En distancias cortas había podido leer algunas obras suyas en antologías de Jonathan Strahan y John Joseph Adams, pero aunque ambas entregas me gustaron, seguía siendo demasiado poco para comprobar su auténtica capacidad.
Es por esto que la publicación de Slipping me ha venido de perlas para poder “estudiar” tanto la ficción como la no ficción corta de Beukes. Saltándome un poco mi norma habitual para reseñar antologías y colecciones, en vez de comentar pormenorizadamente cada relato voy a valorar el conjunto.
Lo primero que salta a la vista es la amplia variedad de temáticas en la que se desenvuelve la escritora, no siempre en la ciencia ficción y con distintas características, ya que podemos ver ejemplos de ciencia ficción militarista como “The Green” como historias de un posible futuro muy cercano como “Pop Tarts”. También es innegable la influencia de su país de origen, no solo por la inclusión de vocabulario sudafricano, si no también por la presencia de temas candentes como el apartheid y la violencia de género. Mi relato favorito es “Slipping”, que da nombre a la propia recopilación y que resulta especialmente aleccionador teniendo los Juegos Olímpicos de Río todavía frescos en la memoria. Beukes es capaz de dejar desbordar su imaginación en un relato psicodélico como “Unathi Battles the Black Hairballs” a la vez que critica el arte moderno y también expresar la agonía del escritor frente a la hoja en blanco en poco más de tres párrafos con “Muse”. Incluso algunos de los relatos se podrían etiquetar como experimentales. En Slipping hay de todo, como en botica.
En cuanto a la no ficción, aunque no es la parte que más recomendaría del libro, creo que nos sirve para conocer a Beukes como persona. Su labor como periodista de investigación, especialmente las razones que la llevaron a escribir The shining girls sitúan en contexto el resto de su obra.
Si no conocéis a esta escritora no sé a qué estais esperando.
A mi Lauren Beukes me gano con Monstruos rotos, como te sumergía en una Detroit decadente llena de personas que tenían unas sombras profundas y que sufrían por dentro más que por fuera. Ya le había leído a Alex que este libro era una recopilación de materiales varios de la autora en la que teníamos un poco de todo, pero a mi me resulta bastante interesante. Aunque antes tengo que leer Las luminosas. Un abrazo^^
Las Luminosas es una lectura más que recomendable. Creo que la traducción de Pilar está muy bien, hasta pilló un fallo del que nadie se había dado cuenta antes. Seguro que te gusta.