La tendencia actual es publicar obras más cortas, que se ajustan mejor al estilo de vida ajetreado que llevamos porque nos exigen menos tiempo para disfrutarlas. Tor.com fue de las primeras editoriales en ver esta tendencia y reforzarla, así que no es de extrañar que haya publicado Even Though I Knew the End, una novela corta que reúne todas las virtudes del formato, permitiendo una lectura ágil, entretenida y que encima deja poso. Poco más se le puede exigir a una obra que no llega a las 150 páginas.
Ya habíamos comentado con anterioridad varias obras de C.L. Polk, pero en esta ocasión la escritora deja de lado la fantasy of manners para escoger otro escenario menos trillado, más actual y muy pero que muy atractivo. La acción transcurre en Chicago, en los años 40. La protagonista es una augur con ciertas capacidades mágicas que trabaja como detective en asuntos mágicos, en busca del mejor postor. Poco imagina cuando acepta estudiar una sangrienta escena del crimen que los pecados de su pasado volverán a por ella y que se verá envuelta en la búsqueda del Vampiro de la Ciudad Blanca.
Mi primer consejo es no leer la contraportada de libro, porque destripa un poco el primer giro de la novela corta y es mejor entrar en la lectura sin tener este conocimiento de causa. También os diré que como yo escuché el audiolibro, no puedo certificar que la lectura de la prosa sea tan atractiva como la narración de January LaVoy, que consigue sumergirte en este mundo de ángeles y demonios, pero que creo que sí lo será porque Polk ya ha demostrado con creces su maestría con la pluma.
Aunque los pactos fáusticos fueron moneda corriente en la fantasía de hace algunos años, es cierto que los sistemas mágicos más imaginativos y originales han ido reclamando su lugar dentro del imaginario colectivo, dejando un poco atrás el típico enfrentamiento entre el bien y el mal y la lucha por la posesión de las almas en el más allá un poco en segundo plano. Pero el eterno conflicto entre la oscuridad y la luz persiste, y la autora hace un uso muy acertado de todo este conocimiento cultural para que sirva de apoyo a la estructura de la novela corta, sin necesidad de tener que pararse a explicar cada detalle.
En este libro hay asesinatos, posesiones, ángeles caídos que pugnan por volver al cielo y aunque todo resulta atractivo, es quizá el relato del amor entre dos mujeres y los sacrificios que están dispuestas a hacer lo que más nos conmueve. Recomiendo encarecidamente la lectura en el formato que sea, porque merece la pena.