Early Riser

Me lo paso muy bien leyendo las novelas de Thursday Next, así que cuando vi que se publicaba una novela aislada de este mundo, decidí probar a ver qué nos ofrecía Jasper Fforde. Sus características habituales están ahí, ese humor británico que a veces puede llegar a resultar exasperante y una imaginación desbordada, pero la falta de un marco de referencia más grande quizá juegue en contra de Early Riser.

La raza humana hiberna para sobrevivir a los inviernos tremendamente fríos de la Tierra. No es una novedad que haya ocurrido por el cambio climático, si no que es así desde el principio de los tiempos. En este escenario tan novedoso, Fforde utiliza todo un nuevo vocabulario que juego con los términos invernales para contarnos la historia de Charlie, que protagoniza la novela y que formará parte del selecto grupo de humanos que no hiberna para que los demás puedan hacerlo sin temor.

El autor juega con el lenguaje con una habilidad sorprendente, siendo este quizá el aspecto más destacado de la novela o al menos el que más me ha llamado la atención. Por ejemplo, el término winsomniac hace referencia a las personas con dificultades para entrar en el largo sueño invernal. Pero hay muchas más que dejaré que vayáis descubriendo vosotros mismos.

Como ya digo, el trabajo de worldbuilding es muy atractivo, pero por desgracia la historia no lo es tanto. Se queda a medio camino entre el thriller de espionaje y una novela costumbrista sin acabar de decidirse por un camino u otro. Los personajes, necesariamente pocos por las características del mundo, son muy pero que muy peculiares, como los zombies que son reutilizados para realizar tareas repetitivas de forma muy competitiva y barata. Si, en la novela salen zombies, pero solo si no son atendidos adecuadamente recurren al canibalismo. En caso contrario, son dóciles y llevaderos. Esto puede parecer absurdo, pero dentro de la lógica interna de la novela es consistente. Del mismo modo, la remuneración de un trabajo no se mide solo en el sueldo, si no que se considera una mejora importante el hecho de disponer de doble ración de pudding para ir acumulando reservas para el invierno.

Como ya digo no me ha terminado de convencer la historia, pero eso no quiere decir que la novela no sea entretenida. Además, tiene un precio muy competitivo en formato electrónico, por si necesitabais un empujoncito que os animara a leerla.

The Rosewater Insurrection

Rosewater fue una de las lecturas más sorprendentes para mí en su momento, una novela de ciencia ficción que tocaba tantos palos que no parecía que fuera posible ligarlos todos, pero Tade Thompson lo consiguió sin problemas.

Tenía interés en la lectura de la continuación y aunque no alcanza el nivel de la entrega anterior, algo muy complicado, si que resulta una lectura adictiva e intrigante.

Lo primero que llama la atención en The Rosewater Insurrection es el cambio de protagonista. La figura de Kaaro deja de ser omnipresente para dar paso a un reparto algo más coral. Esto es un cambio bueno para el libro, ya que aunque Kaaro es un personaje muy atractivo con su moral ambivalente, quizá estaba un poco sobreexpuesto en Rosewater. Aquí sigue representando un papel importante, pero no es el centro sobre el que gira la trama.

Al convertirse en una novela con varios protagonistas, Thompson maneja varias tramas intentando no dar más importancia a unas que a otras, algo que no acaba de funcionar. Mientras que la trama de intrigas políticas del alcalde de Rosewater parece zarandeada por circunstancias ajenas a sus decisiones, la de Aminat avanza de manera firme hacia su objetivo. Hay detalles de humor en la novela, como cuando el presidente de Nigeria le manda fotos pornográficas al alcalde, pero son los menos.

Uno de los principales valores de la novela sigue siendo su situación geográfica en Nigeria, con sus particularidades locales y ese aire de afrofuturismo que tan bien le sienta a un relato de colonización, como reflexión sobre un pasado que quizá pudiera llegar a repetirse con unos actores venidos de otro mundo.

Sin embargo, lo que me ha resultado más interesante es la comunicación con los alienígenas y su plan para conseguir la salvación de la especie. Como de tapadillo se hace una reflexión sobre lo que significa realmente existir, sobre la relación de la memoria con la corporeidad para formar un ente sintiente que creo que será la base para la última entrega de la trilogía. Estoy más que interesada en ver cómo concluye la historia y hace ya tiempo que tengo reservado The Rosewater Redemption. Veremos cómo consigue Tade Thompson dar fin a la historia.

The Seven Deaths of Evelyn Hardcastle

Hace tiempo que no hacía reseñas conjuntas con Antonio Díaz y eso es algo que podía dejar que siguiera ocurriendo. Aquí os traemos nuestros comentarios sobre The Seven Deaths of Evelyn Hardcastle, publicada en castellano como Las siete muertes de Evelyn Hardcastle con traducción de Lorenzo F. Díaz. Como entretenimiento, también podéis intentar averiguar quién ha escrito cada párrafo, aunque creo que no resultará demasiado difícil.

En ocasiones, la mejor estrategia de marketing para una novela es el boca a boca, sobre todo si el libro es bueno. En este caso, la obra de Stuart Turton está haciéndose hueco poco a poco entre los lectores españoles gracias a esta labor de zapa y a su propia calidad.


Parte del éxito se debe sin duda a la curiosa mezcla de géneros que contiene: parte novela de misterio al más puro estilo Arthur Conan Doyle o Agatha Christie, parte drama victoriano y parte ciencia ficción. Una fusión muy exitosa donde las diferentes influencias se combinan pero no se pelean.


¿Pero estamos realmente ante una novela de ciencia ficción? El lector comienza la novela con información muy escasa y no es hasta que avanzamos por sus capítulos que empezamos a vislumbrar algo de la verdadera historia tras los personajes. Su adscripción al género se debe a detalles que no todos podrían interpretar como características de la ciencia ficción.


Es difícil adentrarse en las particularidades de la novela sin destripar nada. Incluso el título da más información de la que me gusta tener antes de empezar a leer un libro. Baste decir que el protagonista inicial se despierta en medio del bosque completamente amnésico y con sólo un nombre en la mente, Anna, y un miedo terrible de que algo le haya pasado.


Esta situación de partida nos servirá para hacernos una idea de lo oculta que mantiene la información relevante el autor. Cual tahúr, mantiene sus cartas pegadas al pecho, imposibilitando cualquier especulación válida hasta bastante avanzado el libro.


Sin embargo cuando llegan las explicaciones, y llegan, dejan al lector pegado a sus páginas mientras los diferentes giros se van desarrollando. Todas las pistas dejadas durante la historia quedan enlazadas sin ningún cabo suelto, lo que evidencia el genio del autor y el trabajo de planificación y revisión del texto.


Se trata de una novela en la que no es fácil adentrarse pero que compensa este esfuerzo con creces. Se disfruta tanto intentando desentrañar la madeja de relaciones entre los personajes secundarios como especulando sobre las causas que han podido derivar en este escenarios.

Especialmente destacable es el hecho de que es la primera obra larga de Turton y demuestra un grado de control sobre el ritmo narrativo muy notable. Personalmente estoy deseando saber en qué se encarga a continuación.

Para hacer más llevadera la espera, nada mejor que leer Las siete muertes de Evelyn Hardcastle, seguro que no os arrepentiréis.

Muchas gracias a @mertonio por dejarse liar de nuevo para estos experimentos.

Cage of Souls

Adrian Tchaikovsky es un autor tan prolífico que algunas veces hay títulos suyos que pasan algo más desapercibidos, no sé si por el marketing o porque simplemente es difícil leer todo lo que publica. Creo que esto es algo que ha sucedido con Cage of Souls, una obra de la que he oído hablar poco pero de lectura más que recomendable.

El sol es un astro moribundo que apenas calienta la ciudad de Shadaprur, último lugar habitable para la humanidad, construida sobre las ruinas de incontables civilizaciones. El protagonista de la historia es Stefan Advani, que en una primera persona muy atractiva y con una voz narrativa ciertamente peculiar, nos va contando sus aventuras y principalmente, sus desventuras.

Por la propia estructura del libro, nos encontramos ante unas memorias escritas, así que el relato no es necesariamente pormenorizado, dando mucha más importancia a unas secciones que a otras (¿he oído por ahí narrador no confiable?). Quizá nos hubiera interesado indagar más en algunos aspectos de la ciudad que en otros, pero Stefan es un guía tirano que nos muestra lo que le interesa. El hecho de que a veces rompa la cuarta pared no hace si no aumentar nuestra relación con Advani.

Sin embargo, su vocación científica nos permite asistir a un asombroso despliegue de imaginación. Tchaikovsky lo mismo nos sorprende con una clase de biología (quizá esto sea menos sorprendente viniendo de quien viene) que con un tratado sobre arqueología. La panoplia de personajes de los que hace uso también es tan variada como atractiva, aunque en cierto modo están supeditados a la propia visión de Advani, consiguen robarle el protagonismo en más de una ocasión.

Se puede leer la obra en clave admonitoria sobre los riesgos del cambio climático, aunque me resisto a encasillar esta obra como clifi. Para mí, es claramente ciencia ficción aunque en algunos lugares la he visto reseñada como fantasía. Quizá sea la propia valía del autor la que hace difícil la descripción de Cage of Souls.

La prosa, aunque algo enrevesada, se lee de forma rápida y consigue que la lectura avance de forma bastante veloz, aunque algunos de los necesarios flashbacks que se introducen durante la narración nos dejen con la miel en los labios de lo que iba ocurriendo para insertar otros datos quizá no tan necesarios. En ocasiones los capítulos pueden llegar a hacerse densos por la cantidad de ideas por párrafo que Adrian va mostrándonos, pero no por ello deja de resultar apasionante.

Astounding

Uno de los propósitos de este año era leer algo más de no ficción y pensaba que Astounding: John W. Campbell, Isaac Asimov, Robert A. Heinlein, L. Ron Hubbard, and the Golden Age of Science Fiction, me vendría como anillo al dedo, principalmente para conocer algo más en profundidad la edad de oro.

La figura de John W. Campbell fue central en el desarrollo de la ciencia ficción, ya que desde su puesto como editor de Astounding seleccionaba qué relatos se publicaban en la revista más influyente del género de la época.

Este libro no se limita a relatar la biografía de Campbell, si no que la enlaza con la de los que quizá fueran los tres autores más influyentes del momento: Heinlein, Asimov y Hubbard. El libro está plagado de anécdotas y extractos de misivas que se mandaron entre ellos, lo que nos permite hacernos una idea de sus relaciones personales, tales como la admiración de Asimov, el aire de superioridad de Hubbard o el extremismo de Heinlein.

La lectura, no obstante, no ha sido todo lo agradable que esperaba. Seguro que hay alguna frase sobre que no esperes nada bueno al conocer a las personas que admiras, porque seguramente te decepcionarán. En este caso, descubrir las bajezas morales de estas personas me ha hecho ver con otros ojos sus obras.

El autor a veces se recrea en detalles realmente escabrosos, especialmente los relacionados con Hubbard que se ve que era un perla, pero el racismo, la homofobia y el machismo de Campbell tampoco le van a la zaga. En su momento, Astounding se convirtió en la plataforma de la dianética y la cienciología, algo que la lógica nos diría que entraba en conflicto con el concepto de ciencia ficción de Campbell, firmemente posicionado en la parte de la “ciencia”. Estas partes del libro me parecen menos atractivas que otras, la verdad.

Lo que es indudable es que Campbell tuvo grandes aciertos, como la publicación de Dune y grandes fallos, como dejar pasar la obra de Ray Bradbury por delante de sus ojos. Pero claro, la labor de un editor es escoger lo que cree que será mejor para su publicación y tiene el sesgo de sus propios gustos e ideas. Es también importante recalcar que iba repartiendo sugerencias e ideas de tramas a muchos de sus autores, y que incluso las Tres Leyes de la Robótica fueron casi creación suya.

Astounding: John W. Campbell, Isaac Asimov, Robert A. Heinlein, L. Ron Hubbard, and the Golden Age of Science Fiction es un libro que interesará a quien tenga curiosidad sobre el inicio de un género. No es que sea una lectura árida y tiene muchas anécdotas que pueden amenizarla, pero también es cierto que en ocasiones me resultaba difícil avanzar en la lectura, atraída por otros libros. Si tienes mitificados a estos autores, será mejor que no te acerques a este repaso a su vida y carrera, porque los verás en su lado más humano y frágil.

And Shall Machines Surrender

No es la primera obra que reseño de Benjanun Sriduangkaew y espero que no sea la última, pero si que es la obra más asequible de esta autora que he leído hasta ahora y eso es algo que se agradece. No porque no me guste la prosa compleja y preciosista que muestra en muchas de sus publicaciones, si no porque con And Shall Machines Surrender muestra un dominio del lenguaje que lo hace más accesible sin dejar de maravillar al lector.

Algunos de los temas que se tratan en este libro son recurrentes en la trayectoria de la autora, como ciertos toques cyberpunk o la relación de los humanos con las inteligencias artificiales. Tampoco faltan las escenas de sexo lésbico muy explícito, aunque es algo que ya vimos en Winterglass, aquí suben de nivel.

El escenario en que se desarrolla la historia es maravilloso. Shenzen, es una esfera de Dyson utópica donde todas las inteligencias artificiales se han retirado a vivir, tras dejar la unión que compartían con sus compañeros humanos. Pero en Shenzen también hay humanos viviendo y las políticas de inmigración son bastante restrictivas. Quizá las figuras más llamativas son los haruspices, seres humanos elevados que darán cobijo a inteligencias artificiales con las que compartirán su cuerpo mejorado y el control de sus acciones. Precisamente la existencia de los haruspices puede llegar a dar lugar a conflicto en este paraíso, ya que no todas las peticiones para acceder a esta posición pueden ser aceptadas.

Las intrigas políticas surgen por doquier y tienen una importancia relevante en la narración, pero también hay algunas escenas de acción y lucha que me han llegado a sorprender pues es algo que no relacionaba con la autora. Y sin embargo, estos enfrentamientos están narrados de una forma muy cinética y atractiva.

Recomiendo And Shall Machines Surrender como puerta de entrada para la obra de Benjanun Sriduangkaew, porque se ven muchas de las características más habituales de sus libros pero resulta más fácil que otras obras suyas.

The Test

Conocía a Sylvain Neuvel por su trilogía Themis Files, pero con The Test cambia totalmente de tercio, algo que se agradece. Además de la escasa longitud del relato, la utilización de una primera persona muy creíble le sienta muy bien a la narración, ya que consigue que empaticemos completamente con el protagonista.

Todo gira en torno a la realización de una prueba para conseguir la nacionalidad británica de un expatriado iraní. Un tema de candente actualidad, pero con un giro que aporta el toque de ciencia ficción y que Neuvel utiliza de forma muy inteligente para cambiar el escenario cuando lo considera oportuno.

No quiero entrar en más detalles sobre la propia trama porque cualquier comentario podría dar al traste con la idea del autor de sorprendernos. No obstante, creo que es muy acertada su pretensión de mostrarnos qué es lo que se busca con estos test de ciudadanía y criticar las consecuencias. ¿Buscamos la homogeneización de los inmigrantes para que se ajusten a los usos y costumbres de la sociedad a la que quieren acceder? ¿Debemos exigir conocimientos sobre historia, geografía o literatura del país receptor por poner un ejemplo? El canadiense nos plantea estas y otras preguntas, pero no da respuestas, dejando al buen juicio del lector la interpretación de las normas.

Y sin embargo, el final es una bofetada en la cara de cualquier figura bien pensante que tranquilice su conciencia delegando estas decisiones en el poder. Una historia muy recomendable para reflexionar.

Walking to Aldebaran

La última obra que ha caído en mis manos de Adrian Tchaikovsky no es una lectura fácil. La estructura escogida, un soliloquio de un personaje cuya estabilidad mental deja bastante que desear es de por sí complicada, pero es que además el autor ni quiere ni puede desvelar parte de la historia al principio de la obra, dejándonos un poco perdidos. Cuando empieza a usar flashbacks la fotografía comienza a revelarse ante nosotros y ayudados por la escasa longitud de Walking to Aldebaran conseguimos alcanzar un final satisfactorio, aunque el camino haya sido tortuoso.

Quizá debería haberme dado cuenta antes porque hay bastantes pistas sobre cuál es el principal referente de esta novela corta, pero el autor sabe cómo narrar para que lleguemos a empatizar con el protagonista, a pesar de las acciones que lleva a cabo. Un aspecto muy conseguido de la obra es la ambientación, extremadamente agobiante, con los pasos del protagonistas llevándole a través de un laberinto físico que asemeja al laberinto mental en el que se encuentra. También es capaz de hacer referencias a casi todos los terrores que comúnmente se asocian al espacio exterior y los extraterrestres, con mandíbulas, intestinos, ácidos estomacales y bastante casquería.

En el libro también podemos ver algo de crítica a la sociedad actual y a los enfrentamientos de los políticos por “ponerse la medalla”, pero es solo una pequeña pátina que enluce el resultado final.

Lo que no me esperaba son los toques de humor que aparecen en la narración, a pesar del tono general de Walking to Aldebaran. Es un gran mérito del autor conseguir que este párrafo, por ejemplo, no desentone para nada en el libro:

“I was also one of the pilots, although space piloting is one of those situations where they should really equip you with a dog, so your job is to feed the dog and the dog’s job is to bite you if you touch any of the expensive equipment.”

Quizá estos toques de comedia oscura son lo que más me ha sorprendido de la obra, que resulta un poco difícil de comentar sin destriparla. Así que será mejor que la leas directamente, para que podamos conocer tu opinión.

This is How You Lose the Time War

Esperaba con gran expectación la llegada de This is How You Lose the Time War, principalmente por la coautoría de Max Gladstone, un escritor que me encanta, pero también por la temática de viajes en el tiempo, uno de los grandes temas clásicos de la ciencia ficción

Al contrario de lo que imaginaba, no se trata de una obra exclusivamente epistolar, porque aunque las cartas que se envían las dos agentes temporales de bandos enfrentados sustentan la novela corta, también hay variedad de pasajes descriptivos que no utilizan este formato.

Lo que si destacaría es la belleza de la prosa utilizada, capaz de hacer que te entretengas en captar los distintos matices y referencias imbuidos en las frases. Este mismo juego de referencias puede llegar a cansar a algún lector que busque una aproximación más directa. Creo que en esto se nota la influencia de Amal El-Mohtar pero Gladstone no se le queda atrás.

La intrincada forma en que las agentes se van dejando mensajes en las distintas líneas temporales que modifican según los planes de cada una de sus facciones es una fuente constante de sorpresa y regocijo para el lector, en una vuelta de tuerca constante cada vez más hiperbólica.

Sin embargo, la información que acabamos recibiendo de un futuro o de otro, o de la propia guerra que libran las agentes Rojo y Azul, es muy escasa. Es señal de gran maestría por parte de los autores ser capaces de desvelar tan poca información pero que aún así nos veamos arrastrados por el flujo de la narración, rebuscando pequeños detalles para hacernos una composición de lugar que por la propia naturaleza de la historia no va a quedar completa.

Es esta una historia romántica unida de forma inseparable a la ciencia ficción de sus viajes en el tiempo. Es una apuesta arriesgada para los autores, pero creo que merece la pena dedicar nuestra atención a esta pequeña joya.

Hexarcate Stories

Después de leer las tres entregas de la trilogía Machineries of Empire se ve que me había quedado con más ganas de este universo, así que me alegré mucho con la noticia de la publicación de Hexarchate Stories. Algunos de los contenidos ya los había leído, así que en esos referenciaré la reseña anterior de ser posible. Aunque me ha gustado el libro en general, no estoy segura de que se pueda disfrutar plenamente sin haber leído las otras novelas, porque en muchas ocasiones lo que hace es profundizar en algún aspecto que se había eliminado de la novela o que simplemente se había pasado por alto.

The Chameleon’s Gloves

Trepidante historia donde un Kel expulsado de su clan se convierte en timador utilizando sus dotes camaleónicas para copiar los movimientos de las personas de forma casi perfecta.

How the Andan court

Una poética declaración de amor.

Seven Views of the Liozh Entrance Exam

Me gusta este estilo de flashmash para contar una historia a base de pinceladas, aunque en este caso no llega a desarrollarse mucho. Al autor también le gusta por los comentarios que hace, aunque cree que tienen poco mercado.

Omens

Apenas pudimos conocer a la madre de Jedao en la trilogía original así que resulta agradable encontrarse aquí una pequeña historia que la tiene como protagonista. De hecho, los relatos siguientes también son de la infancia de Jedao, pero en estos la figura materna brilla por su ausencia.

Honesty

Desde la visión de la hermana pequeña de Jedao, asistimos a una trifulca que tiene lugar en su planeta de origen. Me gusta el giro final que dejar entrever la compleja personalidad del protagonista de la trilogía.

Bunny

Esta es una historia muy tonta que supongo que tendrá más sentido para quienes posean un gato, pero al no ser mi caso, no me dice nada.

Black Squirrels

Otra broma del autor, sobre la vigilancia de los campus académicos.

Silence

Una nueva perspectiva de Jedao desde el punto de vista de su hermano mayor, con la posibilidad añadida de ver los detalles que poco a poco conformaron su personalidad.

Extracurricular Activities

Gloves

Un relato eminentemente sexual, sin trama ni nada que se le parezca, que le sirve al autor para añadir una nota erótica a la recopilación.

Hunting Trip

Esta historia en particular, aporta poco a la antología, salvo saber que Jedao malcría a sus sobrinas, un dato que ya conocíamos.

The Battle of Candle Arc

Calendrical Rot

Aquí nos presentan lo que podría haber sido un capítulo introductorio para la primera novela de la trilogía, que quizá hubiera suavizado la tremenda curva de aprendizaje que exigía la lectura.

Birthdays

A partir de aquí los relatos cambian de protagonista para que conozcamos mejor a Cheris, tras haber explorado un poco el pasado de Jedao. Siendo una de las principales características de Cheris su dominio de las matemáticas, es interesante como Yoon Ha Lee nos muestra las diferencias entre calendarios y la imposición de normas por parte del colonizador.

The Robot’s Math Lesson

Otra anécdota de la infancia de Cheris, que no deja de ser eso, un recuerdo.

Sword-Shopping

En esta ocasión, la elección de un arma de duelo le permite al autor definir un poco más al personaje.

Persimmons

Los servidores representan un papel bastante importante en el desarrollo de Ninefox Gambit, así que entiendo que el autor haya querido darle algo de protagonismo estos robots.

Irriz the Assassin-Cat

Una historia entrañable sobre las relaciones familiares que incluso los más despiadados asesinos pueden tener.

Vacation

Desplazando el foco a otro personaje de la trilogía, en esta ocasión son Brezan y su esposa quienes protagonizan un relato ligero y poco memorable sobre una visita al zoo.

Gamer’s End

El uso de la segunda persona en una narración no es algo muy habitual, pero Yoon Ha Lee utiliza este recurso de manera muy interesante para este relato. El ritmo es trepidante y aunque parece claro cuál es el objetivo de la prueba a la que “nos” someten como protagonistas, me ha gustado de principio a fin.

Glass Cannon

Con este último relato Yoon Ha Lee añade una coda a la trilogía que cambia el final de la historia y la deja preparada para las continuaciones que pueda querer escribir. Algunos de los recursos que utilizan parecen un poco tramposos pero realmente abre un nuevo mundo de posibilidades que ya veremos cómo explota.

Hexarchate Stories es una lectura muy recomendable y complementaria para quien haya disfrutado de la trilogía Machineries of Empire. De no ser así, no merece la pena leer el libro, pues se perderá gran parte de su valor.