Por cortesía de la editorial Pàmies he podido leer un ejemplar de la novela juvenil El Leviatán de Babel.
Es importante tener en cuenta algunas cosas antes de leer el libro, ya que ni la preciosa portada ni la presentación dan a entender que se trate de una novela destinada a un público joven, así que puede llevar a malentendidos. También se trata de la primera entrega de una trilogía, por lo que tampoco nos encontramos ante una historia conclusa.
Una vez soslayadas estas dificultades, nos encontramos ante un novela ágil y entretenida. Hace tiempo leí que es difícil que las editoriales publiquen ciertos libros que mezclan géneros, a no ser que sean destinados a literatura juvenil. En ese caso especial, todo vale. Es por esto que Hagar Yanai puede jugar con fantasía, mundos paralelos y psicofármacos y salir bien parada.
Hay cuatros personajes principales que ven entrelazadas sus aventuras y desventuras a lo largo del libro, en algunas ocasiones de manera forzada, pero no tanto como para que resulte clamoroso. Yonatán y Ela son hermanos, hijos de un importante científico que desarrolla fármacos contra la tristeza y la depresión crónica. Ninó y Hidel viven en otra realidad, en Babel, donde la magia está al orden del día y se prepara una revolución contra el orden establecido.
No me interesa desvelar mucho la trama, que tiene momentos divertidos y también otros para reflexionar. Lo que sí me ha llamado mucho la atención es la crítica nada velada a la adicción a las sustancias legales . En una época como la actual en la que hay pastillas para todo, que sea una novela juvenil la que haga pensar sobre esto resulta llamativo. Quizá, como dijo Paolo Bacigalupi, es a este público al que todavía se le puede hablar y razonar sobre temas que los adultos no queremos oir.
También me ha gustado la mezcla de diversas mitologías: hebrea, sumeria y babilónica (citando a Sense of Wonder) que no son muy conocidas por estos lares y que aportan un soplo de aire fresco a la típica historia basada en mitos griegos.
En resumen, una vez aceptado el tono ligero de la novela, se puede disfrutar y espero la siguiente entrega para poder seguir viendo cómo se desarrolla la historia.