El día D ¿Quién mató al presidente?

DiaDpresidenteHace poco comenté la primera entrega cronológicamente hablando de la serie el Día D, aunque no fue la primera publicada en España, ya que este honor lo tuvo el volumen del que voy a hablar ahora, Día D ¿Quién mató al presidente?.

He de decir que una vez leída entiendo la decisión editorial que hizo que se publicara en primer lugar, este tebeo tiene mucha más garra que el anterior y esperemos que sea una muestra representativa de lo que está por venir.

El punto Jonbar en esta ocasión está claramente definido como en la anterior, el cambio es que el presidente elegido por los estadounidenses no es Kennedy sino Nixon, algo que bien pudiera haber sucedido habida cuenta del estrecho margen de diferencia en los votos que le dio la victoria a JFK en la realidad.

Sin embargo, la historia no gira sobre la presidencia de Nixon, aunque este telón de fondo y su reelección durante varias legislaturas son el detonante de los hechos que se relatan. El personaje principal es un motorista de los Ángeles del Infierno de ascendencia francesa reconvertido en combatiente en la guerra de Vietnam, embrutecido por por estos hechos y que solo conoce la violencia como forma de vida. Él será el encargado de llevar a cabo una tarea que parece la solución a los problemas mundiales.

El dibujo cumple su función de manera notable, como en la entrega anteriormente reseñada, pero me gustaría hacer hincapié en el color aplicado a las viñetas, especialmente a las de guerrilla nocturna en Vietnam. Lanzallamas devastando los alrededores de los soldados que evocan ese imaginario colectivo que tenemos de las escenas de esa guerra.

En definitiva esta entrega es bastante mejor que la de ¡Los rusos llegan a la Luna!

Creo que volveré a darle una oportunidad a este Día D con el siguiente tomo que se publique en España.

El día D ¡Los rusos llegan a la Luna!

Día DHace poco se publicaron en España los tebeos de la serie Día D, en los que se explora qué hubiera ocurido si ciertos acontecimientos claves de la historia del siglo pasado hubiera sucedido de otra manera. Ante una idea tan sugerente como esta ucronía no pude resistirme y me hice con dos de ellos.

Me extrañó que el primero de ellos fuera en realidad el volumen 5 de lo publicado en Francia, pero como cada entrega es independiente supuse que sería debido al mayor tirón que pueda tener la entrega en la que Kennedy no muere asesinado que la conquista de la Luna por parte de los rusos. Aún así, decidí leerlo en el orden original y la primera entrega es esta “¡Los rusos llegan a la Luna!”.

Es un hecho constatado que cuando Armstrong puso el pie en la Luna la Unión Soviética abandonó una carrera espacial que era ruinosa ya que el “gran objetivo” se les había escurrido entre los dedos. En este tebeo, en cambio, son los soviéticos los que primero llegan a la Luna y ambas superpotencias establecen una pequeña colonia en nuestro satélite, donde se cree que ocurre una versión en miniatura de la Guerra Fría.

Cuando la trama llega a la base lunar me encontré con un problema que hizo que mi suspensión de la incredulidad cayera por los suelos y creo que esto ha influido negativamente en mi valoración del trabajo de los guionistas Fred Duval y Pécau. Se supone que los astronautas no se cortan el pelo porque los restos provocaban averías en todos los aparatos de la estación. De acuerdo con esto, pero, ¿por qué entonces están fumando durante la mayoría de las viñetas? ¿Es que la ceniza no provoca problemas? Este pequeño (o no) detalle hace que la lectura la haya realizado desde un punto más crítico. El giro final también parece más que obvio y la idea con la que los astronautas y cosmonautas piensan que pueden acabar con la Guerra Fría está extraída directamente de la serie V, como recordarán los más viejos del lugar.

El apartado gráfico está bien cubierto por un solvente Phillipe Buchet que muestra su versatilidad en los distintos escenarios en los que se desarrolla la historia y que capta a la perfección los rasgos característicos de los personajes históricos para que sean inmediatamente reconocibles. Es de agradecer el no muy velado homenaje a Stanley Kubrick y a su 2001.

En definitiva un tebeo que podía haber sido más interesante y que se queda en un mero pasatiempo. Espero que las otras entregas sean mejores.

La leyenda de Broken

brokenMe resulta difícil enmarcar este libro en un género determinado, pues aunque en un principio pensé que era fantasía por la colección en la que se publica y por contar la historia de un reino que nunca existió, en realidad se podría clasificar como novela de fantasía histórica.

El autor Caleb Carr es historiador militar, y no pierde oportunidad de hacernos ver sus extensos conocimientos en este campo a lo largo de todo el libro. La abundancia de información llega hasta límites insospechados, como esas más de doscientas notas al pie de página que utiliza y que resultan claramente desproporcionadas.

El manuscrito que cuenta “La leyenda de Broken” cae en primer lugar en manos del historiador Edward Gibbon, que lo remite por carta a su colega Edmund Burke. Este procedimiento de legitimación de la historia de Broken recuerda al utilizado por Umberto Eco en “El nombre de la rosa”, pero con menos éxito.

El núcleo del relato es la existencia del reino de Broken, un lugar perdido en las montañas alemanas en el que se lleva a cabo una estricta política de selección humana. Cualquier descendiente con alguna tara física o psíquica es desterrado de la ciudad tallada en la montaña y enviado al exilio con los Bane, un pueblo formado con los defectuosos de Broken. La tensión entre ambos pueblos no para de crecer, ya que responden a los ultrajes del enemigo con nuevos ataques más exacerbados.

Sin embargo, ninguno de estos enfrentamientos es importante en comparación con lo que se avecina, una plaga de grandes proporciones que pondrá en peligro la forma de vida de toda la región.

El ritmo es lento y por momentos se hace exasperante, además el autor gusta de regodearse en los orígenes etimológicos de los nombres de los personajes, algo que no aporta nada a la narración y que ralentiza el ritmo de la historia.

Lo peor de todo es que a pesar de la longitud del libro (estamos hablando de casi 900 páginas en español) al final te da la impresión de que la parte que podría ser más interesante queda sin explicar.

“La leyenda de Broken” es un libro muy largo al que hay que acercarse sabiendo lo que hay. No esperéis encontrar aquí magia o héroes, más bien lo contrario. Todo lo que ocurre tiene una explicación más o menos racional y por momentos te parece estar leyendo un thriller médico de Robin Cook, cosa que no tiene por qué estar mal, si es eso lo que buscas.

Show me your boo… ks, meme

Algunos fantascopistas hemos pensado hacer un meme, en este caso un meme fotográfico. Vamos a enseñar nuestras estanterías, allí donde se acumulan libros y libros que en algún momento querríamos leer y no sabemos si podremos, ya que The Pila avanza inexorable, así como libros que ya ocupan un lugar en nuestra memoria.

Se admiten varias fotos, porque no todo el mundo es tan afortunado como para tener una maravillosa estantería donde guardarlo todo y la mayoría tenemos nuestros libros repartidos en varios sitios.

Librería2Librería3Librería1Me parece que las fotos no hacen justicia a la acumulación de libros, como dato apuntar que las dos primeras fotos tienes tres niveles de profundidad y que los que están más visibles son las últimas adquisiciones que no he leído, todavía. También hay más libros repartidos en casa de mis padres, pero algún día se reunirán en la Biblioteca Fantástica Ficción (pendiente de patente).

Otros blogs que han participado en el meme:

Sense of Wonder

Leemaslibros

Voracilector

Biblioteca de Ilium

Deprisa, deprisa

Más ficción que ciencia

Jean Mallart

Fata Libelli

Donde acaba el infinito

Si os apuntais a seguir el meme y ponéis el enlace en los comentarios, iré actualizando la entrada.

Sherlock Holmes y la sabiduría de los muertos

sabiduria_muertosCon esta entrada Fantástica Ficción participa en el especial Sportula que coordina Sense of Wonder.

Desde antes de que vencieran los derechos de autor sobre el personajes Sherlock Holmes, pero desde entonces con más fuerza, siempre ha habido pastiches que recrean nuevas aventuras del famoso investigador por otros autores que no sean Arthur Conan Doyle.

Esta obra ante la que nos encontramos se enmarca dentro de estos homenajes, pero sin ser una experta en el canon holmesiano, creo que lo hace desde un respeto escrupuloso por el personaje, imitando en todo momento el estilo de narración de Watson y encajando perfectamente en la cronología del detective.

En esta ocasión Holmes debe investigar la desaparación del explorador noruego Sigerson, personaje creado e interpretado por el mismo Holmes durante el tiempo que el mundo lo dio por muerto. Aunque este es solo el comienzo de una búsqueda de un libro perdido, en la que Holmes y Watson tienen que ponerse en contacto con la secta Amanecer Dorado.

Durante esta investigación, Rodolfo Martínez no deja pasar la oportunidad de hacer aparecer en las páginas a personajes históricos de la época, empezando por el propio Doyle y siguiendo por Alesteir Crowley o Lovecraft, pero no el Lovecraft que conocemos si no su padre.

También me gustan las pistas que deja caer sobre otros casos y personajes, que dejan el camino abierto para otras historias que esperan su turno para ser narradas.

La narración sigue su curso hasta que Holmes se ve obligado a decir una de las frases que se te quedan clavadas en la memoria:

—Usted me ha oído decir muchas veces, Watson, que cuando se ha eliminado lo imposible, lo que queda, por improbable que pueda parecer, es la verdad. Pero, ¿qué pasa cuando no se puede eliminar lo imposible?

La única pega que se le puede poner a la historia es su extrema brevedad, que nos deja con ganas de más. Pero esto tiene fácil solución con las otras historias de Holmes que también están disponibles en Sportula.

Como extra a la edición impresa que es la que tengo, se incluyen dos relatos más.

Desde la tierra más allá del bosque

A través de la narración del doctor Watson y del diario del doctor Edwards vemos como Holmes, ayudado por Van Helsing, se enfrenta al mayor peligro que haya podido correr no su cuerpo, si no su alma. Aunque las historias de vampiros no son lo mío, no deja de ser entretenida.

La aventura del asesino fingido

En esta ocasión no hay elemento sobrenatural que intervenga en el misterioso asesinato de una joven que se iba a casar. A pesar de que Holmes está retirado, pide a Watson que investigue y guía sus pasos hasta la resolución del caso.

No puedo más que recomendarte que aproveches la oportunidad que hay este mes para comprar “Sherlock Holmes y la sabiduría de los muertos” por solo 0,99.

Día del Libro 2013

imagen-diadellibroEn mi casa es tradición hacer un gran pedido a cyberdark el Día del Libro. Aunque compramos libros durante todo el año, siempre nos hace ilusión que llegue este día, hacemos un listado, revisamos disponibilidades… todo un entretenimiento. El día 23 a las  00.01 horas nos conectamos a la página para hacer el pedido, y se ha llegado a dar el caso de que los libros estaban en casa esa misma tarde.

Supongo que en otras casas no se verá esto como algo normal, pero es una pequeña costumbre con la que nos divertimos y he pensado que os gustaría saber cuáles van a ser los libros que pidamos.

La lista de inicio era la siguiente:

  • El visitante inesperado, de John Scalzi.
  • Las furias de Alera, de Jim Butcher.
  • La hija del Nilo, de Javier Negrete.
  • La bomba seis y otras historias, de Paolo Bacigalupi.
  • El vacío de la evolución, de Peter F. Hamilton.
  • Mongoliad, VV.AA.
  • Osama, de Lavie Tidhar.
  • Mareas de medianoche, de Steven Erikson.
  • Luz de estrellas lejanas, George R.R. Martin.
  • Lucky Starr 2, de Isaac Asimov.
  • Prospectivas, VV.AA.
  • Terra Nova, VV.AA.
  • El carpintero y la lluvia, de Rodolfo Martínez.
  • Cabos sueltos, de Rodolfo Martínez.
  • Adios a la Tierra, de Isaac Asimov.
  • El mapa del cielo, de Félix J. Palma.
  • El cementerio de barcos, de Paolo Bacigalupi.
  • Roma Invicta, de Javier Negrete.

Ya sé que son muchos libros, pero no os preocupéis por mi economía que se quedan en menos.

Para empezar, “Las furias de Alera” y “La hija del Nilo” no están disponibles en cyberdark, así que se retiran de la lista. Una lástima, llevo mucho tiempo detrás del de Butcher, pero por una cosa o por otra no acaba de caer en mis manos. Y eso que lo intento.

Dentro del Hugo Voter Packet se supone que vendrá “Redshirts, así que el de Scalzi también se cae de la lista porque no lo estaba especialmente entusiasmada con él (“La historia de Zoe” no me dijo nada) y ya me leeré el nominado al Hugo.

“El vacío de la evolución” todavía no ha salido en español, así que seguirá en la lista para la vez siguiente.

“Adios a la Tierra” de Asimov lo vi el otro día y me pareció muy caro para el librito tan pequeño que era… así que se cae también.

“El mapa del cielo” ya me lo leí prestado, me gustaría tenerlo en mi colección, pero no es prioritario.

De los dos de Bacigalupi, he pensado solo coger el de relatos, siempre habrá tiempo para el otro.

Con lo cual nos quedan:

  • La bomba seis y otras historias, de Paolo Bacigalupi.

Ya leí y comenté The people of sand and slag y me pareció muy bueno, a ver en qué compañía viene.

  • Mongoliad, VV.AA.

Me gusta mucho Stephenson y quiero ver qué tal ha salido esta novela con tantas manos.

  • Osama, de Lavie Tidhar.

Me llama mucho la atención esta realidad alternativa donde Osama Bin Laden no es el que conocemos.

  • Mareas de medianoche, de Steven Eriksson.

Aunque cuesta mucho meterse en ellos, estoy picada con los libros de Malaz y siento curiosidad por saber por dónde sale el autor en esta ocasión.

  • Luz de estrellas lejanas, George R.R. Martin.

Como ya sabréis George es uno de mis escritores favoritos, así que ver su evolución como escritor no puede ser más llamativo.

  • Lucky Starr 2, de Isaac Asimov.

Esta es una concesión a la nostalgia. Las aventuras de Lucky Starr fueron una de mis primeras aproximaciones a la ciencia ficción.

  • Prospectivas, VV.AA.
  • Terra Nova, VV.AA.

Estas dos antologías de relatos pueden darme una visión general de la escena en España, de la que no tengo mucha idea.

  • El carpintero y la lluvia, de Rodolfo Martínez.
  • Cabos sueltos, de Rodolfo Martínez..

Los dos de Rodolfo Martínez son para mi marido que es fan suyo así que no puedo comentar nada. De hecho no sé si al final los pediremos.

  • Roma Invicta, Javier Negrete.

Es de Negrete y es de Roma, no hay más que comentar.

Lo que puedo decir que una vez que estén en mis manos, no sabré por cual empezar.

¿Cuáles son vuestras peticiones para el Día del Libro?

El Héroe (II)

heroe2PortadaAquí podéis leer la reseña del primer tomo.

Me sorprende cómo cambia el tono en esta entrega final de “El héroe”, mucho más oscuro y crepuscular. Sobre todo la escena de comienzo, cuando Heracles se vuelve loco y arremete contra sus hijos hace que se te encoja el corazón. La representación de esta pesada carga, con tres fantasmas que ha de arrastrar tras de sí durante las siguientes viñetas está repleta de simbolismo.

Tras esta barbaridad,  Heracles se retira a una  montaña en el confín del mundo (homenaje al homenaje de las 12 pruebas de Astérix) y el crimen campa a sus anchas por Grecia. Es curiosa la forma de contarlo de Rubín, con entrevistas de televisión a Euristeo e imágenes de las manifestaciones en la calle a favor de su regreso. Éste se produce cuando le encuentra Yolae, figura también importante en los mitos de Hércules, pero bajo el nombre de Yolao.

Euristeo está bajo la constante amenaza de Hera, que lo destruirá si en las últimas prueba no derrota a Heracles.

La historia es bien sabida, pero el diálogo de Heracles con Prometeo y con Atlas cuando busca las manzanas de las Hespérides nos deja muchos puntos para la reflexión. La historia de Prometeo es un homenaje en toda regla a Mr. Freeze de DC y sirve para enlazar con el final de la siguiente tarea.

El descenso de Heracles al inframundo para tomar al can Cerbero ocupa una parte destacada de este último tomo. Hermes le lleva al sitio de descenso en un coche deportivo, como cabría esperar del veloz mensajero de los dioses. Allí habrá de enfrentarse a Medusa, que no supone para nada un obstáculo en su camino y a otros héroes conocidos o no.

Heracles sale victorioso de todas estas pruebas como ya conocemos y la alegría inunda el mundo. Me gusta especialmente el anuncio tipo “Join the Army” para expedición de Jasón, los avances en la ciencia de Prometeo…

Toda esta felicidad es ínfima en comparación con la duración del relato ya que la traición acecha. Hera no está dispuesta a permitir que Heracles sea feliz y conspira desde las sombras para acabar con él.

Los homenajes están presentes en toda la obra, quizá el más claro son las seis viñetas tipo Snoopy de uno de los últimos capítulos, pero en una segunda o tercera lectura seguro que nos damos cuenta de más detalles. Y éste es un tebeo para releer con calma y ambos volúmenes seguidos, ya que la división en cierto modo perjudica a la primera entrega, la obra hay que contemplarla como un conjunto. La verdad es que me ha gustado mucho.

 La historia acaba siendo cíclica y todo fin puede dar lugar a un nuevo comienzo.

El héroe (I)

elheroeCuando acabé de leer Los Héroes de Abercrombie me di cuenta de que hacía tiempo que daba vueltas por mi casa este tebeo, y nunca acababa de encontrar tiempo para leérmelo, aunque la premisa era más que prometedora, ya que una revisitación de las pruebas de Hércules con algo de ciencia ficción parecía una historia hecha a medida para mí, que tanto me gustan los mitos griegos.

Así que ni corta ni perezosa me senté con este primer tomo entre las manos… y he de decir que no  me levanté hasta que me lo acabé, así de absorbente es la historia. Y no continué con el siguiente porque ya era bastante tarde y el despertador no perdona.

Para cualquier mínimo conocedor de las pruebas de Hércules el argumento no será ninguna sorpresa, el rey Euristeo manda a Heracles diversas tareas para demostrar su valía e intentar eliminarlo, pero nuestro héroe siempre sale exitoso. Hasta aquí todo conocido. Pero, ¿y si os digo que cuando a Euristeo le piden ayuda contra el león de Nemea le muestran la imagen del animal mediante un holograma? ¿Y que tras cortar las cabezas de la Hidra bombardean el lugar desde aviones? La cosa cambia un poco.

El dibujo es muy curioso, es una mezcla de manga con superhéroes que resulta muy adecuada para lo que se quiere narrar. Las referencias a los superhéroes son constantes, Euristeo juega con muñecos de la Liga de la Justicia y Diana de las amazonas es puramente Wonder Woman, por ejemplo.

La narración avanza a través del dibujo. Me parece muy llamativa la persecución de la cierva de Cerinia que en pocas viñetas consigue relatar el paso de las estaciones en la captura del animal. La distribución de las viñetas se ajusta perfectamente a lo que se cuenta y Rubín no pierde oportunidad de mostrarnos diversos encuadres para cada situación, como cuando Heracles y Teseo van en moto a la tierra de las amazonas.

Mención aparte merece el color de la obra. Los tonos vivos que se utilizan refuerzan la historia y permiten al autor jugar con el verde y el rojo como colores fundamentales de Hera y Euristeo y con otros para el resto de los personajes.

También conviene resaltar el uso del mito como producto de masas que se deja entrever en uno de los capítulos, con Heracles anunciando de todo, que creo que será el camino por el que seguirá la segunda entrega del cómic.

Tengo en casa esperándome el segundo tomo y o mucho se tuercen las cosas o va a caer enseguida.

Los Héroes

HeroesLa última tendencia en la fantasía épica es que sea lo más realista posible, es decir, no evitar en ningún momento la sangre y la violencia connatural a las batallas e incluso regodearse en ellas. También se tratan de una forma más desinhibida el sexo y las luchas de poder. Todo esto se hace quizás en contraste con la alta fantasía abanderada por Tolkien y sus émulos.

Uno de los máximos exponentes de esta forma de escribir es Joe Abercrombie, cuya trilogía La primera Ley y sus secuelas han tenido una muy buena acogida entre los aficionados. “Los Héroes” es una de las continuaciones de estos libros, siguiendo la historia de algunos personajes que aparecían en las entregas anteriores. Otra secuela a mi entender superior es “Best Served Cold”, pero eso otra historia.

Los Héroes del título se corresponden con una suerte de Stonehenge en la cima de una colina, donde transcurre la mayoría de la acción. Es propiamente una ironía, pues el comportamiento de los personajes dista mucho de ser heróico.

El libro tiene dos lecturas, una más superficial y otra más profunda. En la primera, vemos como se desarrolla una batalla en tres días, mientras que la segunda se puede interpretar como un alegato contra la guerra y la inutilidad de las muertes por un puñado de tierra.

El estilo de Abercrombie es ágil y divertido y hace que las casi ochocientas páginas de que consta esta entrega se lean en un suspiro. Me gustó especialmente un capítulo titulado Bajas, donde el punto de vista del narrador va saltando varias veces de un soldado a otro que le da muerte. Es una forma de narrar muy cinemática. También destacan mucho sus comparaciones, jocosas en la mayoría de las ocasiones y algunos de los personajes, que se alejan de los estereotipos comunes, como Finree o Calder. Aunque otros caen dentro del esquema habitual, el viejo guerrero que no sabe hacer otra cosa que guerrear (Craw), el general valeroso pero inepto (Jalenhorm), el aprovechado que negocia con los despojos de las batallas (Tunny)…

El autor vuelve a usar los monólogos en los que podemos ver en cursiva qué es lo que piensa un personaje en contraste con lo que dice realmente. Este recurso ya lo utilizó con el inquisidor Glotka, y aunque no alcanza aquí el mismo nivel, también resulta muy cómico.

La edición que he leído es en español y con esto me he encontrado con un problema. No sé cómo se toman estas decisiones, pero entiendo que los nombres de los personajes, especialmente cuando son apodos se tendrían que traducir todos. O no traducir ninguno. Pero unos sí y otros no da lugar a confusiones, e incluso hace que sean necesarias notas a pie de página explicando los apodos en el original. Me gustaría que alguien que supiera más que yo de estas lides me explicara en qué se basan las decisiones de traducción de este tipo, porque me parece algo inconsistente.

En resumen, este es un libro muy entretenido que se lee en un suspiro. Si te gusta Abercrombie y su propuesta, no dejes de leerlo.

Mitos y leyendas

GRIEGAMe gustan las reinterpretaciones de la mitología clásica y no tan clásica en clave de ciencia ficción o fantasía, ya que se mezclan dos temas que son de mi agrado, utilizando referencias a nuestra historia más antigua para contar nuevas vivencias.

Sin duda la primera obra considerada de ciencia ficción que toma elementos de mitología es Frankenstein, no hay más que fijarse en su subtítulo, El moderno Prometeo.

La base más habitual de la que se suele partir es la mitología griega, por ser acervo común de la cultura occidental, que da lugar a la mayoría de las obras que he leído. Se pueden citar varios ejemplos de este tipo de influencia, como la recreación de la guerra de Troya que Dan Simmons lleva a cabo en “Ilión” y “Olympo” y en un sentido muy parecido, los libros finales de Tramórea de Javier Negrete, “El sueño de los dioses” y “El corazón de Tramórea”.  De hecho, el español debutó en la novela larga con “La mirada de las furias”, también claramente deudora de los mitos griegos. Otra referencia entre muchas a estos mitos es el protagonista de la difícil pero interesantísima trilogía La edad de oro de John C. Wright que se llama Faetón, en clara referencia al hijo de Helios como estrella caída.

De una forma más sutil,  aparecen referencias a los mitos griegos en esa obra maestra que es “Tú, el inmortal” de Roger Zelazny. Este autor es posiblemente el que más mitologías diferentes ha utilizado en sus novelas, ya que aparte de la griega, otras tradiciones mitológicas en las que se ha basado son la hindú en “El señor de la luz”, la nórdica en “The mask of  Loki”,  la egipcia en “Creatures of light and darkness” y alguna otra que sin duda me dejo en el tintero.

Puede parecer sorprendente, pero también hay bastante literatura que menciona unos mitos mucho más modernos, como lo son las leyendas americanas que se mencionan en la trilogía de Marte de Kim Stanley Robinson o que son la base de los libros de Alvin Maker de Orson Scott Card. No he leído “American Gods” de Neil Gaiman, pero según los comentarios es una compilación de todos los mitos que se te puedan ocurrir.

Alejándonos del canon occidental, en próximas fechas se va a publicar en España la Trilogía de Obsidiana de Aliette de Bodard, que utiliza la mitología azteca. Esta serie de libros los espero con impaciencia, ya que lo que he leído de Aliette me ha parecido magnífico y tengo curiosidad por saber cómo se ha manejado con una cultura distinta a la suya.

Mención aparte merecerían los mitos artúricos, que se han utilizado una y mil veces como fuente de inspiración para la fantasía moderna y no tan moderna. Como ejemplos, basta señalar “El tapiz de Fionavar” de Guy Gavriel Kay o “The once and future king” de T.H. White o, de forma más tangencial, “Last call” de Tim Powers. Estos mitos se pueden considerar enraizados en los celtas y quizá el mayor exponente de estas leyendas sea “Bosque Mitago” de Robert Holdstock, pero se podría decir que gran parte de la fantasía occidental que no es heredera espiritual de Tolkien lo es de los mitos celtas. Y si no, de los mitos eslavos, también algo desconocidos por estos lares pero que un gran escritor como es Andrzej Sapkowski nos presenta en los excelentes libros de Geralt de Rivia.

Como en otras ocasiones, tenéis los comentarios para recordarme algún título que os parezca interesante y que no haya mencionado.