Bajo el pseudónimo M. A. Carrick, se esconden las escritoras Marie Brennan y Alyc Helms, que han aunado esfuerzos para crear una trilogía fantástica con intrigas políticas, tarot y magia.
Ren es la protagonista de la primera entrega, titulada The Mask of Mirrors, una timadora que se dispone a hacer su mayor truco hasta la fecha: hacerse pasar por una familiar perdida de una pudiente familia para escapar de la pobreza. No obstante, esta es solo una de las muchas máscaras que habrá de llevar para conseguir su objetivo, mientras que se ve envuelta en un juego de intrigas políticas para el que quizá no estaba preparada.
El mundo que han creado las autoras es bastante atractivo y además consiguen sorprender al lector cuando la historia se desarrolla por unos derroteros que no eran los esperados. Se le da mucha importancia al tarot y los augurios definidos por la fecha de nacimiento de cada persona, tanto que incluso las autoras crearon un anexo en su página web con información al respecto. En este sentido, me recuerda mucho a la Guía de Lectura de Ignotos Mayores de Ferran Varela, así que si os gusta el tema, no dejéis de darle una oportunidad.
El sistema mágico, no obstante, queda un poco más velado. La posibilidad de viajar al mundo onírico se revela como fundamental en el libro, pero no queda demasiado claro el funcionamiento, aunque también hay que comprender que no se pueden mostrar todas las cartas en el primer volumen.
Hay conceptos que están muy bien representados, como la familia que uno escoge en vez de aquella a la que pertenecemos por nacimiento y los vínculos afectivos que se forman a través de la amistad. El racismo y la lucha de clases está más que presenta en todo el libro, desde la lucha de Ren por asegurarse un futuro con una familia noble hasta el resto de personajes que disfrutan de una posición u otra dependiendo de su cuna, no de su capacidad.
Los personajes son complejos y la sociedad está bastante bien representada, si bien el ritmo en ocasiones se vuelve lento quizá por una excesiva atención al detalle, por la parsimonia en la acción y las descripciones. En general se trata de una novela pausada, aunque tenga sus momentos de acción y hay que disfrutar del proceso. Es por esto que no la recomiendo para todos los públicos, debido a su longitud y a su ritmo. Pero aceptando estas premisas, es una novela perfectamente disfrutable.