Diamond dogs, Turquoise days

200px-Diamond_Dogs,_Turquoise_Days_cover_(Amazon)Hay libros que hacen que te vuelvas a enamorar de tu género favorito. Diamond dogs, Turquoise days ha conseguido que vuelva a mirar a la ciencia ficción con la esperanza de maravillarme en la lectura.

Las dos novellas que conforman el libro están situadas en el universo de Espacio Revelación. En la primera hacen referencia a Calvin Sylveste y al monumento a los Ochenta, así que si conocemos las historias desarrolladas en otros libros de Alastair Reynolds, disfrutaremos aún más de estas.

Diamond dogs tiene todo lo bueno que nos puede ofrecer Reynolds, elevado a la máxima potencia. Un objeto de origen desconocido que hay que investigar, algo de humor con referencias a Indiana Jones y la película Cube, algo de gore, acertijos matemáticos… La tensión de la narración va en aumento conforme vamos pasando las páginas y lo único que sigue moviendo a los personajes es el ansia de conocimiento, algo muy en línea con la nueva space opera en la que todas las necesidades están cubiertas, salvo la curiosidad innata al ser humano. Cuando llega el momento de las revelaciones, aunque en parte lo podíamos esperar no deja de sorprendernos. Y, ¿qué decir del final? Un broche de oro. Diamond dogs ha pasado directamente a mis lecturas favoritas de todos los tiempos.

Turquoise days es también una muy buena novella, aunque palidece en comparación con la anterior, que es simplemente espectacular. Una historia sobre un mundo en el que se investiga a los malabaristas de formas de una forma alejada al resto del universo, aunque el hilo conductor del relato es la relación entre dos hermanas que se sumergen en este océano vivo para volver cambiadas… o no volver.

Si alguna vez sentiste curiosidad por la forma de vida conocida como malabaristas de formas, aquí encontrarás mucha información, siendo este el principal aliciente de la lectura, que complementa a las demás novelas de este autor situadas en Espacio Revelación.

Una lectura imprescindible.

The well of lost plots

wellHay cosas que no se le pueden negar a Jasper Fforde, entre ellas una imaginación desbordada y un extenso conocimiento de la literatura inglesa. Aunando estas características con el mundo alternativo creado alrededor de la figura de Thursday Next, nos encontramos ante una nueva entrega de una saga que tiene muchísimos seguidores en las Islas Británicas, pero que es quizás menos conocida por estos lares (aunque se hayan traducido cuatro libros en Nova).

En esta ocasión, la acción transcurre casi en su totalidad en el mundo de ficción al que Thursday se ha retirado tras los sucesos de Lost in a Good Book, para coger fuerzas, tener un embarazo tranquilo (¡ja!) y aclarar sus ideas para recuperar a su marido, erradicado de la existencia.

La trama es bastante animada y hay momentos realmente jocosos, como las preguntas de los personajes ficticios sobre el mundo real (“¿por qué el pegamento no se queda pegado dentro del bote?”), además de los habituales juegos de palabras (los personajes de los libros no tienen problemas para pronunciar los más enrevesados trabalenguas y Fforde hace uso intensivo de esta particularidad).

El autor no deja títere con cabeza en una crítica no muy disimulada a la burocracia excesiva, a la ceremonia de los Óscar, a las invenciones relacionadas con la literatura (no parece muy amigo del libro electrónico). Y ¿qué decir de la afirmación de que hace siglos que no existe un idea original en la ficción? Esto podría dar para un encendido debate.

Todo esto compensa en cierta medida el que The Well of Lost Plots sea un libro de transición, a la espera del último de la serie, ya que aunque el ritmo es trepidante, en ocasiones se llega a un cierto barullo. Es como si Fforde estuviera finalizando el libro y a su vez preparando el terreno para el siguiente.

The affinities

affinitiesDecían del Cid “¡Qué buen vasallo si tuviese buen señor!” y me parece una analogía muy acertada compararlo con el autor Robert Charles Wilson. Y es que Wilson tiene ideas espectaculares, pero que acaban fallando en la ejecución, en su propia maña como escritor.

La premisa en la que se basa The affinities no puede ser más actual. En un mundo en el que la soledad del individuo es habitual, donde cada vez es más difícil encontrar un sitio en el que “encajar”, una nueva teoría sociológica permite establecer afinidades. De este modo, gracias a unos test y unas pruebas de ADN una empresa es capaz de ponerte en contacto con grupos de personas afines a tus gustos. Puede parecer un servicio de citas elevado a la enésima potencia, y esa es una de las principales críticas que se le hacen al servicio al comienzo del libro, pero acaba siendo mucho más.

El protagonista, Adam Fisk, es un estadounidense que estudia Diseño Gráfico en Canadá. Nunca se ha sentido muy unido a su familia, con un padre autoritario, un hermano siempre perfecto, una madrastra y un hermanastro algo especial. Quizá la única persona a la que quería era su abuela, con la que tenía una muy buena relación. Por ese sentimiento de no pertenencia a ningún lugar en particular decide hacerse el test de afinidad, y así descubrirá lo que para él puede ser el paraíso.

Wilson utiliza muy acertadamente esa tan humana necesidad de pertenencia y es algo que explora a lo largo del libro. En ese aspecto, The affinities es pura especulación sociológica y resulta muy atractivo.

Sin embargo, la narración no me acaba de convencer. El tono frío del protagonista se torna casi gélido en ocasiones, incluso cuando está con los demás miembros de su grupo. Resulta muy difícil empatizar con alguien así, que parece tan elitista y que llega a despreciar a todo aquel que no forma parte de su afinidad.

También me hubiera gustado que la historia se hubiera centrado menos en Adam y hubiera ampliado el enfoque para ver un escenario más amplio, donde se vieran las interacciones con las demás afinidades y la situación general en el mundo, de la que solo tenemos atisbos y que se acerca inexorablemente a la catástrofe. O por lo menos que hubiera descrito algo más las afinidades, porque solo vemos como son los Tau y un atisbo de los Het, las demás clasificaciones no pasan de ser un concepto borroso definido por letras del alfabeto fenicio.

Aunque mi mayor pega es la utilización algo chapucera de ciertos recursos para elevar la tensión, como la repetición de frases del estilo “esto fue 3 horas antes del apagón” o “pero en dos horas vendría el apagón y lo cambiaría todo”. No resulta muy sorprendente cuando finalmente llega el tan cacareado apagón, ¿verdad?

Me gusta mucho la exposición de los problemas que tiene la empresa que comercializa los test de afinidades y cobra una cuota anual por la permanencia porque me parece muy real. Los problemas con la  propiedad intelectual están a la orden del día y resulta imposible ponerle puertas al campo, aunque algunos sigan intentándolo.

En definitiva, The affinities es excelente en el apartado de las ideas en las que se basa pero falla en la ejecución, lo que es una lástima porque podríamos estar hablando de uno de los libros del año.

The Furies of Calderon

furiascalderonHay algunos libros que mi amigo Miquel Codony define como “guilty pleasures”, esos que lees aún a sabiendas de que no son de gran calidad, pero que disfrutas de todas formas.

Con The Furies of Calderon nos encontramos ante un claro ejemplo de esto. Una historia bastante tópica, que sigue casi paso a paso el Manual para escribir fantasía, con su joven personaje incomprendido con algo que le diferencia de los demás, su amenaza externa, los problemas en los que se ve envuelto a su pesar… todo dentro del guión acostumbrado.

Lo que salva a este libro del montón es el oficio con el que escribe Butcher, que sabe lo que nos gusta y que consigue a base de cliffhangers y cambios de puntos de vista una narración bastante fluida, que aunque no se sale de los cauces habituales consigue engancharte para seguir leyendo.

El sistema de magia que se emplea consiste en asociarse con alguna de las Furias que pueblan el reino y que permiten utilizar los elementos a tu favor (agua, aire, tierra…) aunque no se explica en profundidad, parece bastante equilibrado aunque esto no se podrá comprobar hasta que veamos cómo siguen las demás entregas de la serie Codex Alera.

Con un toque juvenil, es una novela para leer bastante rápido que entretiene, lo cual sin duda era el objetivo de su autor.

Trece monos

Trece monosTrece monos es el esperado regreso de César Mallorquí a la literatura de género y es innegable que se trata de un gran regreso. Los cuentos contenidos en esta recopilación, de muy variada factura, merecen la pena en su mayoría por sí mismos, pero todos unidos forman una más que recomendable lectura.

El decimoquinto movimiento

Ya comenté este estupendo relato, una forma inmejorable de comenzar la recopilación. Es obvio que al releerlo se pierde algo de la sorpresa pero nos deja centrarnos en la forma encomiable en que está escrito.

Virus

Un cuento que desborda imaginación, que acaba siendo un poco tonto pero que aún así resulta divertido.

Cuento de verano

En su blog, César regala cada Navidad un pequeño relato de ambientación más o menos navideña, y este cuento es uno de ellos. Basándose en una historia archiconocida, la de mister Scrooge y sus fantasmas, pero dándole una de vuelta de tuerca bastante cruel nos encontramos con una historia que nos puede arrancar una sonrisa o una mueca.

El regalo

Otro de los relatos navideños del autor, aunque en esta ocasión sea más corto y a mi entender, bastante previsible.

El muro de un trillón de euros

Muy curioso este relato seleccionado para una antología europea por Andreas Eschbasch. Aunque predomina la nostalgia, me gusta mucho la forma de afrontar la historia de unos ancianos que ven prolongada su vida mediante técnicas artificiales, pero que prefieren refugiarse en sus recuerdos antes que afrontar la realidad.

Fiat tenebrae

La historia subyacente a este relato me recuerda poderosamente a otro también basado en las teorías de Pierre Teilhard de Chardin, aunque soy incapaz de situarlo. Pero a pesar de las similitudes, las variaciones son los suficientemente interesantes como para resistir la comparación.

La isla del cartógrafo

Romántico cuento sobre el único regalo que un pobre cartógrafo puede dedicar a su amada, una isla inventada.

Ensayo general

Esta historia es casi un chiste, que tiene algo de gracia pero que tampoco es memorable. El niño Jesús y los magos de oriente en otra versión.

El jardín prohibido

Bastante obvio, lo mejor de “El jardín prohibido” es la ambientación donde está situada la acción.

Océano

Curiosa aproximación a la creación de la inteligencia artificial, con cierto tono mesiánico que no me acaba de convencer.

Cien monos

Otra broma del autor para los lectores, esta mucho más afilada que las anteriores que acabará dando nombre a la antología.

Todos los pequeños pecados

Imposible no leer este relato sin acordarse de la serie Me llamo Earl, con la búsqueda del protagonista de remedar errores del pasado.

Naturaleza humana

Un muy buen final de la antología, con una historia conspiranoica de mayor profundidad de la esperada y con un final muy duro.

Merece la pena hacerse con esta antología. Si no la tienes, no sé a qué estás esperando.

Brass sun : La rueda de los mundos

brass_sunHacía tiempo que no comentaba ningún cómic, así que me alegro de volver a las andadas con uno que me ha resultado curioso aunque incompleto, este Brass Sun: La rueda de los mundos.

El sistema solar es en realidad una serie de engranajes que sostienen los planetas en órbita girando alrededor de un sol moribundo. Basado en una idea tan steampunk como interesante, los autores Edginton y Culbard dejan volar su imaginación al más puro estilo Valerian, mientras acompañamos a la protagonista por todos los mundos en busca de la solución que permita a los planetas seguir girando, literalmente. El viaje entre mundos no será en naves espaciales, ¿para qué? Donde se ponga un buen tren…

El aspecto gráfico es correcto y se adapta bastante bien a la narración de aventuras, casi folletinesca que encontramos en sus páginas. La pega que le veo es el uso del color, que en ocasiones satura las imágenes y hace que se pierda claridad expositiva.

En cuanto a la trama, algunas de las cuestiones filosóficas que afloran durante la lectura podrían dar pie a intenso debate, pero no parece esa la intención de los autores, si no dedicarse a la aventura por la aventura, algo de lo que tampoco tengo queja.

Lo que sí me ha moestado es que la historia se quede cortada, sin que en ningún lugar de la edición en español se diga si es una primera parte, si se publicará lo siguiente, si existe continuación. Te quedas con una sensación de timo que no le sienta nada bien a las futuras compras que pueda hacer a ECC.

The traitor

Traitor-Baru1Haciendo un juego de palabras bastante chusco, diría que me he sentido “traicionada” por este libro. Venía haciendo bastante ruido mediático, incluso autores que me gustan mucho hablaban maravillas de él. Y sin embargo, conforme lo iba leyendo, me sentía cada vez más decepcionada.

Hay que concederle a Seth Dickinson cierta originalidad en el planteamiento, ya que la fantasía normalmente no se centra en las aventuras de un contable. El autor le concede mucha importancia a los registros, a la moneda, al comercio… a todas esas cosas que son la base de la civilización, los engranajes que hacen que todo lo demás funcione.

Desgraciadamente, lo que no consigue es que estos temas resulten interesantes.

Baru Cormorant es una joven muy inteligente que vive en una isla que está siendo “colonizada” de forma silenciosa por el Imperio. Poco a poco van cambiando las costumbres de los isleños, forzándoles a negociar con su moneda, a seguir su forma de pensar. Toman a los más jóvenes y les dan la “oportunidad” de estudiar en sus Escuelas siendo así como consiguen moldear a su gusto a lo más granado de la próxima generación.

La estricta moral del nuevo imperio choca frontalmente con las tendencias de esta tierra, donde los matrimonios de tres personas son moneda común. La propia Baru tiene dos padres y una madre y su orientación sexual no da lugar a dudas, ella es lesbiana. Éste será el eje sobre el que girará toda la novela, la negación por parte de Baru de su naturaleza para adaptarse a las exigencias del Imperio.

Sin querer desvelar más de la trama, me gustaría notar que el cambio de escenario que ocurre a continuación es algo brusco, con el objetivo claro de dejar abierto el camino a posibles secuelas.

Las traciones dentro de traiciones, las intrigas políticas y los intercambios pensando en el propio beneficio se suceden en la vida de Baru, pero desgraciadamente Dickinson no consigue que sean creíbles y, lo que es peor, no consigue que capten mi atención. Lo más positivo que puedo decir de este libro es que me ha hecho ponerme al día de otras lecturas, porque siempre buscaba la menor oportunidad para dejarlo de lado. Es muy triste decir esto de una obra, pero es lo cierto.

No puedo recomendar esta novela, que nunca ha llegado a funcionar para mí.

Domnall and the Borrowed Child

domnallDentro de la nueva línea de Tor de novelas cortas, se va a publicar Domnall and the Borrowed Child de Sylvia Spruck Wrigley.

He tenido la ocasión de leerla con cierta antelación y me ha parecido una historia casi canónica de las relaciones de las hadas con los humanos, pero con un pequeño giro que la hace algo más llamativa.

El protagonista es un explorador de la corte feérica. A pesar de su “inmortalidad” siente el paso de los años y habla con nostalgia sobre el pasado, cuando estaba en la cumbre de sus capacidades. Le encargan una difícil misión, tendrá que cambiar un bebé humano por un hada que está tan enferma que solo la leche materna podrá curar su dolencia. Se entregará a esta misión con todo su empeño y sus algo mermadas facultades y tendrán que resolver todas las dificultades que encuentre a su paso.

Si os suena algo tópico es porque lo es. Las historias feéricas con intercambios de niños son de lo más habitual y yo busco algo más atrevido en mis lecturas. A pesar de estar bien narrado y tener ciertos momentos narrativamente tensos, al final queda como una historia más que no nos dejará huella.

The republic of thieves

republicthievesEstoy segura de que no soy la única persona que quedó totalmente fascinada por Las mentiras de Locke Lamora. La carta de presentación de Scott Lynch aunaba una trama interesante con unos personajes arrebatadores, y era un extraordinario comienzo para una saga de siete volúmenes previstos.

Aunque Red seas under red skies, la segunda entrega, perdía algo de fuelle, no por eso dejaba de ser una lectura muy entretenida.

Se esperaba con mucha expectación la aparición de The republic of thieves en el 2013, pero lo cierto es que cuando se publicó la respuesta popular no fue la esperada. Tras haber leído el libro, lo entiendo perfectamente.

La tercera entrega de la saga de los Caballeros Bastardos es un libro de relleno. Como tal, es perfectamente disfrutable, pero no consigue emocionar como ese brillantísimo primer hito que fue Las mentiras de Locke Lamora y es una lástima.

Es una lástima porque tenía los elementos necesarios para una historia sobresaliente. Para empezar, por fin conocemos a Sabetha, que fue una presencia constante en toda la vida de Locke pero de la que apenas conocíamos nada.

Es un lástima porque Lynch se enreda en una narración con dos líneas temporales, el pasado y el presente que a veces se le escapan de las manos, porque se desequilibran una a otra. Combina episodios muy cortos de una con otros más largos y el relato queda descompensado.

Y es una lástima porque la relación entre Locke y Sabetha que debería servir como base para toda la historia es tan tormentosa e ilógica que lo que en un principio puede parecer divertido, con constantes pullas y enfrentamientos intelectuales, acaba por resultar cansado de leer.

No todo es negativo en el libro, que es indudablemente divertido aunque no colme mis expectativas. Los timos a gran escala que preparan los protagonistas, inmersos en una carrera por amañar unas elecciones sin duda son de lo más curioso. Se ve que trampear con los votos es algo atemporal. Y las revelaciones que se hacen sobre el pasado de los personajes no hacen si no incrementar nuestro interés por su futuro.

Sin duda el autor deja el terreno preparado para las siguientes novelas, donde volveremos a encontrarnos a Jean y a Locke, y suponemos que a Sabetha enfrentados a una oscura figura del pasado. Lo malo es que no sé si el camino habrá merecido la pena.

Binti

bintiHay gente que tiene un don para escribir y hay gente que no. Un hecho tan simple como ver unas medusas (algo que sin duda nos habrá pasado a más de uno en verano en la playa) inspiró a Nnedi Okorafor a escribir esta bella historia de ciencia ficción.

Los aspectos que afloran en el relato de Okorafor son muy variados: el enfrentamiento entre tradición y modernidad, el miedo a lo extraño e incomprensible a lo que solo sabemos responder atacando, la opresión de los pueblos dominados y la subyugación de su cultura… Muy en el tono de las historias sobre la diversidad cultural de We see a different frontier, una colección poco conocida que merece mayor repercusión.

La protagonista de la historia es sencillamente fascinante. Binti pertenece a la tribu de los Himba, muy apegados a sus orígenes. Tanto, que cuando recibe la oportunidad de estudiar en una prestigiosa Universidad de otro mundo, sus padres se niegan. Abandonar el pueblo significa abandonar la familia, convertirse en una descastada. Tanto da que quiera poner al servicio de la cultura sus extraordinarias capacidades matemáticas, si se aleja de su hogar quedará marcada para siempre. Y sin embargo, el relato comienza con su huida, dejando atrás todo aquello que conoce para sumergirse en lo desconocido.

Esta cruel decisión que debe tomar desencadenará una serie de acontencimientos que Okorafor nos mostrará de una forma muy acertada. Los diálogos son escasos, tienen más importancia  los propios pensamientos de la protagonista, a la que vemos enfrentarse a situaciones extremas con valor y con lógica, con el conocimiento de sus antepasados.

Y es que Binti consigue aunar una cultura milenaria existente en la Tierra con un espacio habitado por distintas razas sin que haya ninguna disonancia, sin que nos extrañe.

Es sorprendente que en tan pocas páginas se consiga contar tanto. Me parece un acierto su publicación en Tor, en su nueva colección de novelas cortas. Yo pienso seguirla muy de cerca.