Dual Memory

Sue Burke escribe ciencia ficción de corte clásico que nos plantea interesantes dilemas morales. Tras hacerse un hueco en el mundillo con sus dos primeras novelas ecológicas, su obra tomó otros derroteros con Immunity Index y ahora explora otro subgénero de la ciencia ficción con una distopía en la que las IA juegan un importante papel.

Para empezar, el tono de la novela busca ser más sarcástico, dando a entender que los humanos, que están rodeados de inteligencias artificiales por todas partes, no se enteran de la misa la media. Y el arquetipo de esto es el protagonista, Antonio Moro, reconvertido de luchador por la libertad en conspirador, pasando por artista a sueldo. Y todo ello, faltándole varias papas en el kilo, al menos por su forma de relacionarse con el exterior.

El contexto en esta novela es muy importante, ya que el cambio climático ha afectado a la Tierra de forma catastrófica. Seremos testigos de los enfrentamientos entre los Riders (piratas esclavistas) y los mercenarios que defienden las distintas poblaciones, por un precio. El principal escenario es la isla de Thule, creada en el Ártico a base de materiales reciclados, supuestamente un paraíso terrenal que aboga por la neutralidad en esta guerra, pero que no deja de ser un pecio varado en el que si rascas un poco la superficie eres capaz de ver todas sus miserias. Y es que, para empezar, no tienen ni siquiera acceso a recursos alimenticios propios para mantener a su población, lo que me hace pensar que muy bien planificada no estaba.

En contraste con esta situación, hay un mercadeo constante de formas de vida extraterrestres, cuya posesión da prestigio al que lo tiene. ¿La Tierra está desolada y nos ponemos a traficar con bichitos? ¿Con la ingente cantidad de recursos que hace falta para establecer una comunicación entre planetas, lunas y satélites? No me cuadra para nada.

A esta mezcolanza un poco caótica se une la presencia de inteligencias artificiales que parecen supeditadas a los seres humanos, benditas tres leyes de la robótica, pero que en realidad hacen de su capa un sayo y manipulan a los humanos para su propia supervivencia.

El libro no consiguió engancharme en ningún momento, quizá debido a los problemas de fondo que expongo (incongruencia del escenario, protagonista desnortado, conspiranoia…) a pesar de estar bien escrito como Burke sabe hacerlo. A mí no me convenció, pero eso no quita que a otro lector le pueda parecer atractivo. Quizá es que no era para mí.

Cubierta de Dual Memory

Ya sabemos cómo será la cubierta de la nueva novela de Sue Burke, con título Dual Memory. Tor la publicará el 16 de mayo.

Esta es la sinopsis:

Antonio Moro lost everything to the Leviathan League. Now he’s alone in a city on an Arctic island fighting the ruthless, global pirates with the chance to be the artist he always wanted to be. Unfortunately, he thinks it’s a cover story for his real purpose—spying on sympathizers.

When things look bleak, he discovers an unusual ally. His new personal assistant program, Par Augustus. It’s insolent, extroverted, moody, and a not-quite-legal nascent A. I.

Together they create a secret rebellion from unlikely recruits to defend the island from ideological pirates with entitlement and guns, and capitalist pirates with entitlement and money.

Mi traducción:

Antonio Moro lo perdió todo en la Liga Leviatán. Ahora está solo en una ciudad en una isla ártica luchando contra los piratas globales para conseguir una oportunidad para volver por sus fueros. Desafortunadamente, cree que es una pantalla para su verdadero objetivo, el espionaje.

Cuando la cosa se pone fea, descubre un aliado inusual. Su nuevo programa asistente pesonal, Par Augustus. Es insolente, extrovertido, cambiante y una IA no del todo legal.

Juntos crearán una rebelión secreta con simpatizantes inesperados para defender la isla de los piratas ideológicos con armas y privilegios, y de piratas capitalistas con dinero y privilegios.

Esta es la cubierta:

Immunity Index

Hay veces en las que las novelas, sobre todo las especulativas, se adelantan a la realidad, como por ejemplo A Song for a New Day de Sarah Pinsker. Pero, y ahora lo estamos viendo más, algunas veces la realidad se adelanta a la novela. Esto le ha pasado al nuevo lanzamiento de Sue Burke, Immunity Index, que gira entorno a una infección mortal por un coronavirus en EE.UU. y las consecuencias políticas, sociales y económicas que esto conlleva.

Como ya digo, es imposible leer esta novela sin retrotraerse al estado actual de la pandemia y comparar qué ha pasado en la realidad con lo que imaginó la autora. Burke nos presenta un cuadro mucho más terrible, primero porque una de las cepas del virus es tiene una tasa de mortalidad tremendamente alta y después porque el estado político del país es mucho más convulso. Se trata de una novela coral, que hace también hincapié en otro aspecto, el de la manipulación genética en general y la clonación humana en particular, que es quizá la parte más interesante de la narración.

El libro es una alabanza a la insurrección ciudadana contra la opresión gubernamental, aunque las ideas que expone son un tanto inocentes, ya que sería de esperar una represión mucho más brutal por parte de un presidente y su camarilla capaces de idear ataques contra la salud pública con tal de mantener su puesto. Pero para captar estos mensajes, hay que entrar en el juego de Burke, que nos muestra el patriotismo tal y como se entiende en EE.UU. algo que no tiene nada que ver con lo que se puede entender en otros países. Y el hecho de que haya personas capaces de sacrificar su vida para ayudar a los demás no quita que haya otras que se crean investidas de derecho divino a obrar como les plazca. A principios de año fuimos testigos de una versión mucho más moderada de esto, y por lo tanto, el libro se vuelve aún más creíble.

Me hubiera gustado más protagonismo para el científico encargado del estudio del virus y de las estrategias para su anulación. Me parece que se pasa un poco de puntillas por el tema dando más importancia a la parte política, cuando a mi entender sería más atractivo desarrollar más este personaje y la justificación de sus acciones.

Immunity Index es una novela tan actual que el propio entorno en que se desarrolla puede jugar en su contra, ya que no todo el mundo puede tener ganas de leer algo que a lo que podría asistir asomándose por la ventana. Es por tanto difícil recomendarla en la actualidad.

Portada de Immunity Index de Sue Burke

Aquí os traigo la que será portada de la nueva novela de Sue Burke, Immunity Index, con fecha prevista de publicación en mayo del año que viene.

Esta es la sinopsis:

In a US facing growing food shortages, stark inequality, and a growing fascist government, three perfectly normal young women are about to find out that they share a great deal in common.

Their creator, the gifted geneticist Peng, made them that way—before such things were outlawed.

Rumors of a virus make their way through an unprotected population on the verge of rebellion, only to have it turn deadly.

As the women fight to stay alive and help, Peng races to find a cure—and the cover up behind the virus.

Mi traducción:

En unos EE.UU. que se enfrentan a la escasez de recursos, la desigualdad y un gobierno cada vez más fascista, tres jóvenes perfectamente normales van a descubrir que tienen muchas cosas en común.

Su creador, el gran genetista Peng, las hizo así, antes de que estos temas fueran prohibidos.

Hay rumores de un nuevo virus que campa entre la población desprotegida al borde de la rebelión, esperando para volverlo mortal.

Mientras las mujeres luchan para sobrevivir y ayudar, Peng intenta encontrar una cura y la causa del virus.

Esta es la portada:

Interference

Semiosis fue una agradable sorpresa cuando la leí en su momento, así que esperaba con interés lo que me ofrecería su continuación, Interference.

La premisa desde la que se parte es el envío de una nueva expedición humana desde la Tierra al planeta Pax. Teniendo en cuenta las distancias, se concibe como una misión de ida y vuelta pero aceptando que los miembros de la tripulación no volverán exactamente a la misma Tierra que dejaron. Razón de más para querer pertenecer a la misión si en nuestro planeta las cosas no están muy bien.

En el primer capítulo nos encontramos con un nada velado homenaje a LeGuin y su “Los que se alejan de Omelas”, aunque con una nueva vuelta de tuerca que lo hace aún más complicado de asimilar. La situación en la Tierra es distópica, pero no se examina muy a fondo, sirve como escenario inicial de la obra pero luego el foco cambia hacia Pax.

La interacción entre las distintas especies de Pax sigue conformando la base del desarrollo de la novela de Sue Burke, pero en esta ocasión el elemento que propicia el conflicto es la llegada de los terrestres, humanos como los primeros colonizadores del planeta, pero tan distintos como podríamos imaginar. Ni sus motivaciones ni su conocimiento del entorno son comparables, así que presenciamos una nueva relación con una especie casi alienígena.

El regusto a ciencia ficción clásica sigue presente, con algunas escenas muy simplificadas y diálogos que se podrían haber explotado más. En ocasiones me parecía que la extrañeza inextricable a una relación con otra especie se volvía demasiado maniquea y los conflictos se resolvían de forma apresurada.

El final del libro invita a la reflexión. Tengo ganas de saber cuál es vuestra opinión sobre este libro, que en mí ha provocado sentimientos enfrentados.