A veces hay que salirse de los caminos por los que circulamos normalmente para descubrir historias nuevas. En este caso, un libro adherido al realismo mágico y que representa la tradición sudamericana que nos dará a conocer una saga familiar salpicada de magia.
The Inheritance of Orquídea Divina es una saga familiar, la historia de Orquídea Montoya y sus hijos, que tras cuatro matrimonios os podéis imaginar que no fueron pocos. No obstante, Zoraida Córdova en ningún momento apabulla al lector con el árbol genealógico, salvo en la primera parte de un capítulo, porque aunque la familia es extensa, queda claro desde el principio que los puntos de vista van a ser solo 4 (que tampoco es que sean pocos, pero es una cifra manejable).
Orquídea es la hija bastarda de una joven que la considera un error de juventud y cuando su madre se casa y tiene hijos comprende que nunca tendrá un lugar en su corazón. Partiendo de esta base, busca su destino enfrentándose a las adversidades pero en ocasiones sucumbiendo ante ellas.
Me gusta cómo se vertebra la novela alrededor de este personaje, que parece no saber cómo querer a los demás y vive en constante miedo de que su pasado le alcance. Son numerosos los flashbacks para ir conociendo su historia y están muy bien equilibrados con cómo se desarrolla la historia en el presente, dando al lector información privilegiada de la que los nietos de Orquídea no disponen, presentando ante nosotros un juego asimétrico entre lo que van descubriendo y lo que en realidad se conoce. De hecho, durante la lectura me interesaba más esta parte ya transcurrida que la trama contemporánea.
No obstante, lo que más me ha gustado del libro es el tratamiento casual de la magia como algo inherente a la vida cotidiana. Ya conocía la especial relación de las culturas centroamericanas con sus difuntos, pero el hecho de que algunos aspectos mágicos estén totalmente aceptados en el día a día (la aparición de la noche a la mañana de una mansión, un rosa floreciendo en el centro de la frente de un bebé…) aporta un tono onírico y maravilloso a la realidad más mundana.
Se trata de un libro emotivo y repleto de secretos que no descubre todos sus misterios al lector. Y la interpretación del audiolibro por parte de Frankie Corzo me parece muy adecuada al tono misterioso de raíces iberoamericanas que transluce en toda la obra.