Con la muy buena impresión que me llevé con la lectura de Promise of Blood sabía que no pasaría mucho tiempo hasta que siguiera con la lectura de la trilogía Powder Mage.
El siguiente libro se titula The Crimson Campaign y aunque desgraciadamente no llega al nivel del anterior, no por ello deja de ser una lectura entretenida y meritoria.
La acción se sitúa justamente a continuación del desarrollo de Promise of Blood y los puntos de vistas son los de los mismos personajes, Tamas, Taniel y Adamat. El world-building sigue estando excelentemente construido pero algunas de las imágenes y situaciones caen en el tópico. El abandono de uno de los personajes en un fumadero de sustancias estupefacientes es algo repetido hasta la saciedad en otras novelas de ambientación histórica similar (salvando las distancias en cuanto a lo “histórico”). Tampoco es sorprendente la existencia de una “superescuela de espías”, que luego venden sus servicios al mejor postor.
A pesar de estas objeciones, los personajes siguen siendo el punto fuerte de Brian McClellan. Las terribles situaciones a las que se van enfrentando van haciendo mella en ellos. Tamas se ve sometido a privaciones físicas, Taniel bordea la extenuación en una lucha sin cuartel y Adamat sufre torturas en el plano psicológico, mucho más duras para su mente que para su cuerpo.
Dentro de mi desconocimiento, creo que las batallas están narradas de una forma bastante creíble, con movimientos envolventes y aprovechando el terreno en cada circunstancias, de forma que no todo se decide por la magia (aunque tenga un papel importante) si no por el genio militar de los implicados. El autor da la impresión de haber estudiado a fondo las guerras napoleónicas.
Los personajes femeninos a cuya escasez me refería en la reseña anterior siguen brillando por su ausencia, aunque en este caso aparezca uno nuevo que probablemente tenga mayor protagonismo en el desenlace de la trilogía.
Desconozco si el oportunismo de las fuerzas implicadas en la guerra responde a un plan premeditado, supongo que esto se desvelará en el tercer libro, pero lo que está claro es que la situación es bastante desesperada. Pronto sabré como acaba la trilogía.