The Wolf of Oren-Yaro es la primera instancia de una trilogía fantástica bastante recomendada que a mí sin embargo no me ha terminado de convencer.
Me gustaba la idea de partida de una protagonista fuerte, una reina en su mundo que ha conseguido mantener su puesto a pesar del abandono de su marido, en un matrimonio de interés político pero que parecía también sostenido por el amor. Pero es que casi desde el principio todas las decisiones que va tomando Talyein no hacen si no abocarla al fracaso, con una ingenuidad preocupante para alguien que supuestamente ha estado toda su vida preparándose para el trono.
Desde el principio, el hecho de doblegarse a las condiciones bastante peregrinas de su marido para una reunión con unos objetivos poco claros en un terreno manifiestamente no neutral nos puede parece una maniobra bastante torpe, pero si está acompañada de sus consejeros más astutos y una guardia leal… pues sigue pareciéndome torpe, aunque con algunos visos más de deparar un éxito.
Nada mas lejos de la realidad. Talyein se ve arrastrada por los suburbios de una ciudad desconocida y ha de poner en juego todos sus recursos tan solo para sobrevivir. Y gran parte de sus avances se deben más a la casualidad que a sus propios méritos.
La figura de Khine, el estudiante de medicina devenido en timador hace algo más llevadera con su presencia la lectura, porque al menos parece tener la cabeza sobre los hombros aunque tenga un sentido del honor bastante peculiar. Las primeras escenas en las que aparece su familia me parecen las más divertidas del libro con diferencia.
Poco a poco se van desvelando planes y traiciones que llevan años desarrollándose sin que la reina se haya percatado de nada, obsesionada como estaba con otros temas más acuciantes, como mantener a duras penas la paz entre sus belicosos súbditos.
La presencia de la magia es testimonial y verdaderamente parece más un recurso deus ex machina que una decisión premeditada por parte de la autora.
He leído en varias reseñas que la influencia filipina es palpable a lo largo de la novela. Mi total desconocimiento de esa cultura hace que no pueda juzgar si esto es cierto o no, o si está bien planteado. Me gusta la fantasía que huye de los tópicos medievales europeos ofreciendo algo distinto, pero no he sabido disfrutarlo lo suficiente con este libro debido a la endeblez del planteamiento. Ha resultado un poco frustrante en su lectura.