Esperaba con gran expectación la llegada de This is How You Lose the Time War, principalmente por la coautoría de Max Gladstone, un escritor que me encanta, pero también por la temática de viajes en el tiempo, uno de los grandes temas clásicos de la ciencia ficción
Al contrario de lo que imaginaba, no se trata de una obra exclusivamente epistolar, porque aunque las cartas que se envían las dos agentes temporales de bandos enfrentados sustentan la novela corta, también hay variedad de pasajes descriptivos que no utilizan este formato.
Lo que si destacaría es la belleza de la prosa utilizada, capaz de hacer que te entretengas en captar los distintos matices y referencias imbuidos en las frases. Este mismo juego de referencias puede llegar a cansar a algún lector que busque una aproximación más directa. Creo que en esto se nota la influencia de Amal El-Mohtar pero Gladstone no se le queda atrás.
La intrincada forma en que las agentes se van dejando mensajes en las distintas líneas temporales que modifican según los planes de cada una de sus facciones es una fuente constante de sorpresa y regocijo para el lector, en una vuelta de tuerca constante cada vez más hiperbólica.
Sin embargo, la información que acabamos recibiendo de un futuro o de otro, o de la propia guerra que libran las agentes Rojo y Azul, es muy escasa. Es señal de gran maestría por parte de los autores ser capaces de desvelar tan poca información pero que aún así nos veamos arrastrados por el flujo de la narración, rebuscando pequeños detalles para hacernos una composición de lugar que por la propia naturaleza de la historia no va a quedar completa.
Es esta una historia romántica unida de forma inseparable a la ciencia ficción de sus viajes en el tiempo. Es una apuesta arriesgada para los autores, pero creo que merece la pena dedicar nuestra atención a esta pequeña joya.