Esta lectura es tan corta e intensa como un puñetazo sin avisar en el estómago. Es claramente deudora de The Running Man, aunque le da otra vuelta de tuerca a la historia.
Robert Jackson Bennett nos sitúa en unos Estados Unidos deshumanizados, que han quedado atrás en la supremacía global, claramente adelantados por los chinos. Y esto no ha hecho si no agudizar los problemas de una sociedad obsesionada con las armas como “protección” contra los ataques del “enemigo”, un ente que no está muy definido pero que amenaza cada uno de sus pasos. En medio de este clima de paranoia, un show televisivo ofrece la carnaza que les reafirma en sus opiniones. Vigilance es un tiroteo sobre inocentes que no se sabe cuándo tendrá lugar, pero para el que hay que estar preparado. Los índices de audiencia son sencillamente brutales, pero aún así el marketing quiere más… y dispone de herramientas para ello.
El autor utiliza de manera muy acertada el ritmo de la historia y la violencia inherente a este tipo de relato. El clima de miedo que ahoga a la sociedad estadounidense en el año 2030 es terreno próspero para la venta de armas masiva, en una extrapolación no sé si demasiado exagerada de lo que ocurre en la actualidad. Y sin embargo, lo más preocupante no es esto. Es la verosimilitud de las reflexiones que en algunos momentos aparecen, como la insensibilidad que acaba resultando de la exposición continua a la violencia. En particular hay un pasaje sobre la muerte de niños que resulta especialmente sobrecogedor, en una suerte de círculo vicioso que hace que los espectadores no sean capaces de apartar los ojos de la televisión.
El hecho de que se utilicen dos puntos de vista para enfrentar distintas opiniones me parece bastante acertado, aunque la mayor carga de la narración la lleve el alto ejecutivo de marketing responsable del programa televisivo.
Recomiendo Vigilance a quien desee leer un mensaje político muy fuerte en contra de la proliferación masiva de las armas, con algunos toques futuristas pero sobrecogedor por lo verosímil que llega a resultar.